Declaración de la AMM sobre el Envejecimiento


Adoptada por la 67ª Asamblea General de la AMM, Taipei, Taiwán, octubre 2016
y revisada por la 76.ª Asamblea General de la AMM, Oporto, Portugal, octubre de 2025

INTRODUCCION

El mundo está experimentando un aumento sin precedentes de la esperanza de vida. Durante el siglo pasado, unos 30 años se han agregado al promedio mundial de la esperanza de vida al nacer (EVN). Sin embargo, estos aumentos son muy variables, muchas de las comunidades más pobres en todos los países y un mayor porcentaje de la población en los países más pobres han tenido menos incremento en cuanto a esperanza de vida en este período.

El aumento de la longevidad ha coincidido con una disminución del número de niños, adolescentes y adultos jóvenes, ya que algunos países experimentan tasas de fecundidad total por debajo del nivel de reemplazo, lo que eleva el promedio de edad en dichos países.

Los desafíos del envejecimiento particularmente en los países en desarrollo se ven complicados por el hecho de que rara vez existen los recursos esenciales y la infraestructura básica. En la mayoría de los casos, las poblaciones envejecen más rápido que los recursos y la implementación de infraestructuras.

El personal que no recibe remuneración, en especial para las personas mayores que necesitan atención o cuidados paliativos prolongados, debe ser apoyado y motivado para equilibrar su función de cuidados con su vida profesional y social, a la vez que puedan mantener su propia salud y bienestar.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el envejecimiento saludable como “el proceso de desarrollar y mantener la capacidad operativa que permita el bienestar en la edad de vejez” [1]. El término “capacidad operativa” se utiliza para describir las capacidades que permiten a todas las personas ser y hacer lo que tienen razones para valorar. En relación con esto, la Plataforma AGE Europa define la equidad de edad como «una sociedad inclusiva, basada en el bienestar de todos, la solidaridad intergeneracional y el pleno derecho a disfrutar de la vida, participar y contribuir a la sociedad. Al mismo tiempo, deben respetarse plenamente los derechos y responsabilidades de cada persona a lo largo de su vida». El envejecimiento saludable presupone una perspectiva del ciclo vital cuando los determinantes que influyen en el envejecimiento saludable operan durante toda la vida de un individuo.

Es esencial repensar la forma en que la sociedad y los médicos valoran la edad y promover un papel activo de las personas mayores en la comunidad, sin discriminación, como se establece en la Declaración de la AMM sobre la discriminación de las personas mayores en la atención sanitaria.

 

PRINCIPIOS GENERALES

Gastos médicos asociados con el envejecimiento

  1. Existe una fuerte evidencia de que las enfermedades crónicas, en lugar de la edad per se, aumentan el uso (y costos) de los servicios de salud. Sin embargo, las enfermedades crónicas y discapacidades son cada vez más frecuentes con la edad avanzada. Por lo tanto, el uso de la atención médica y el gasto van en aumento a la par con la edad.
  2. En muchos países, el gasto en atención médica para las personas mayores se ha incrementado en los últimos años a medida que más intervenciones y las nuevas tecnologías se han hecho disponibles para los problemas comunes en la edad avanzada.
  3. Se debe tener en cuenta el potencial impacto no deseado del tratamiento excesivo, ya que algunas opciones de investigación o tratamiento no necesariamente contribuyen de manera beneficiosa a la salud general del paciente.

Efecto del Envejecimiento en los Sistemas de Salud

  1. Los sistemas de salud se enfrentan a dos retos al aumentar la longevidad: la prevención de las enfermedades crónicas y la discapacidad y la entrega de atención de alta calidad y rentable que es apropiada para personas, de todas las edades. En las regiones menos desarrolladas la carga de enfermedades en la vejez es más alta que en las desarrolladas.

Consideraciones Especiales de Salud

  1. En comparación con la población general, los adultos mayores tienen más probabilidades de experimentar aislamiento social y soledad. Estos factores de riesgo contribuyen a las enfermedades crónicas comunes en los adultos mayores, como el deterioro cognitivo y la demencia, al afectar negativamente su salud física y mental. Aproximadamente 1 de cada 4 personas mayores experimenta aislamiento social, y las investigaciones demuestran que el impacto del aislamiento social y la soledad en la mortalidad es similar al del tabaquismo, la obesidad y la inactividad física[2].
  2. Las principales causas de la discapacidad en el mundo son las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas, los trastornos musculoesqueléticos y las enfermedades neurológicas y mentales, incluidas las demencias. Algunas enfermedades comunes en la edad avanzada son especialmente incapacitantes y se benefician de la detección y tratamiento precoz.
  3. Las enfermedades crónicas, en particular las cardiovasculares, la diabetes, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y varios tipos de cáncer son comunes entre las personas mayores e incluyen enfermedades prevenibles a través de comportamientos saludables o intervenciones de estilo de vida, y los servicios de salud preventivos eficaces y las intervenciones de políticas.
  4. Mientras que la investigación podría conducir eventualmente a la prevención eficaz de la discapacidad o el tratamiento, la gestión temprana es clave para controlar la discapacidad o mantener la calidad de vida.
  5. Las personas mayores pueden ser más vulnerables a los efectos de accidentes dentro y fuera de casa. Puesto que las personas mayores siguen trabajando, estos riesgos deben ser evaluados y gestionados. Los que se lesionan pueden tener una recuperación complicada por otras vulnerabilidades médicas y comorbilidades.

Consideraciones para los responsables de políticas y profesionales de la salud

  1. A nivel de la sociedad, lograr la igualdad de edad requiere medidas en múltiples sectores. Por ejemplo, las soluciones de diseño pueden ayudar a crear entornos más amigables para las personas mayores y, a menudo, benefician a la población en general.
  2. Igualmente, lograr un envejecimiento saludable a menudo requiere una variedad de profesionales que trabajan como un equipo articulado.
  3. Las personas mayores provienen de diversos orígenes. Las políticas, los sistemas, los entornos, la atención y la educación y formación médica que se analizan podrían necesitar ser adaptadas para brindar una atención óptima a cada individuo.

Continuidad de la atención

  1. Una continuidad integral de los servicios de salud debe ser aprobada con urgencia cuando la edad de la población aumenta. Debe incluir la promoción de salud, prevención de enfermedades, tratamientos de curación, rehabilitación, manejo y prevención de la caída, y el cuidado paliativo.
  2. Diferentes tipos de agentes que prestan atención deben utilizarse para ofrecer estos servicios, a partir de uno mismo y la familia / atención informal – a veces en forma voluntaria – a los proveedores e instituciones basadas en la comunidad.

Creación de Sistemas de Salud Optimos

  1. La cobertura universal de salud debe proporcionarse a todos, incluidas las personas mayores.
  2. La gran mayoría de los problemas de salud puede y debe tratarse a nivel comunitario. Con el fin de proporcionar la atención comunitaria óptima y la garantía de coordinación de la atención a lo largo del tiempo, es muy importante fortalecer la Atención Primaria de Salud (APS) en los sistemas de salud, al abordar la escasez de personal de la salud y la planificación y asegurar los recursos financieros adecuados y el suministro de equipamiento en las instalaciones de APS, como se estipula en la Declaración de la AMM sobre Atención primaria de salud. Esto incluye el empoderamiento del personal de salud comunitario y de los equipos de atención interdisciplinaria para prestar servicios adaptados a las personas mayores, en especial en contextos de recursos limitados.
  3. A fin de fortalecer la APS para promover el envejecimiento saludable, hay principios de la OMS basados en la evidencia para la APS según la edad en tres áreas que deben ser considerados: información / educación / comunicación / capacitación, sistemas de gestión de la atención y el medio ambiente físico de los centros de la APS.
  4. El sector salud debe instar a los sistemas de salud a apoyar y facilitar el acceso a todas las dimensiones de la atención a las personas a medida que envejecen.
  5. Los sistemas de salud deben adaptarse al envejecimiento para garantizar su sostenibilidad financiera y evitar desequilibrios.
  6. Los sistemas de salud y las comunidades deben implementar intervenciones basadas en evidencia, como prescripción social, programas de participación comunitaria e iniciativas de inclusión digital, para reducir el aislamiento social y sus impactos en la salud.
  7. Se deben fomentar las consultas preventivas, en particular para identificar los riesgos relacionados con la edad y mantener la independencia.
  8. Es necesario reforzar la comunicación durante las campañas de vacunación invernal dirigidas a las personas mayores. Se debe facilitar y fomentar el acceso a la vacunación.

Especificidades de la atención médica

  1. La mayoría de los sistemas de salud formales se han desarrollado con énfasis en “cuidados intensivos o atención catastrófica» de una población mucho más joven, a menudo centrada en las enfermedades transmisibles o lesiones. Los sistemas de salud deben enfatizar otras necesidades, en especial la prevención, el manejo de las enfermedades crónicas, el deterioro cognitivo, los cuidados paliativos y la atención de largo plazo cuando traten a las personas mayores. Si bien los servicios de cuidados intensivos son esenciales para personas de todas las edades, no se centran en mantener la salud de las personas ni en brindar el apoyo y la atención continuos necesarios para controlar las enfermedades geriátricas. En todos los centros de cuidados agudos deben estar disponibles la evaluación y el manejo geriátrico de los pacientes de edad avanzada.
  2. Las condiciones médicas de mayor edad a menudo se producen de forma simultánea a los problemas sociales y ambos deben ser considerados por los profesionales de la salud en la prestación de la atención médica. Los médicos, en particular los especialistas, deben tener en cuenta que los pacientes mayores pueden tener otras enfermedades crónicas concurrentes o comorbilidades que interactúan entre ellas y que los tratamientos no deben producir complicaciones prevenibles e involuntarias.
  3. Cuando se inicia un tratamiento farmacológico para las enfermedades crónicas con un paciente mayor, se deben considerar los principios de la farmacología geriátrica.
  4. Se debe respetar el derecho de los pacientes mayores a la autodeterminación. Si el paciente no puede tomar sus propias decisiones, debido a problemas de la memoria y cognitivos, los médicos que tratan a pacientes mayores deben comunicarse con la familia, el personal que no recibe remuneración, y con frecuencia con el cuidador formal, para prestarles apoyo y explicarles mejor el estado de salud del paciente y específicamente qué medicamentos darle.
  5. Al considerar las diferentes opciones terapéuticas, los médicos siempre deben tratar de conocer los deseos del paciente y reconocer que para algunos la calidad de vida será más importante que los potenciales resultados de intervenciones más agresivas.
  6. Se debe promover soluciones digitales y técnicas apropiadas y herramientas que puedan mejorar la atención y su acceso para las personas mayores. Se debe movilizar la cooperación internacional y la asistencia técnica para apoyar a los países en desarrollo en la construcción de infraestructura y servicios sostenibles que aborden las necesidades de las poblaciones que envejecen.

Educación y formación para los médicos

  1. Todos los médicos deben estar educados y formados adecuadamente para diagnosticar y tratar los problemas de salud de las personas mayores, lo que implica la incorporación del envejecimiento en los planes de estudios de medicina, incluida la geriatría, gerontología y cuidados paliativos. En particular, los médicos generales deben tener acceso a la información y recibir educación y formación para identificar y prevenir la polifarmacia y las interacciones medicamentosas potencialmente adversas, y recibir educación en terapia farmacológica geriátrica.
  2. Se debe prestar atención médica secundaria a las personas mayores si es necesario. Debe ser integral, con consideración de los aspectos psicosociales y también ambientales, conforme con el enfoque de evaluación geriátrica integral. Como se estipula en la Declaración de Hong Kong de la AMM, los médicos también deben ser conscientes de los riesgos de maltrato de adultos mayores y de las medidas a adoptar cuando se identifica o se sospecha el maltrato.
  3. La educación médica continua sobre temas relativos a los pacientes que envejecen se debe enfatizar para ayudar a los médicos a diagnosticar, tratar y manejar adecuadamente la complejidad de la atención de una población que envejece.

 

[1] Healthy ageing and functional ability (who.int)
[2] Social Isolation and Loneliness (who.int) / New details about loneliness and dementia risk – Harvard Health

Declaración, Declaración
Ancianos, Enfermedades crónicas, Envejecimiento, Esperanza de vida

Declaración de Hong Kong de la AMM sobre el maltrato de las personas mayores

Adoptada por la 41ª Asamblea Médica Mundial Hong Kong, septiembr...

Declaración de la AMM sobre la discriminación de las personas mayores en la atención sanitaria

Adoptada por la 73ª Asamblea General de la AMM, Berlín, Alemania...

Declaración de la AMM sobre Atención Primaria de Salud

Adoptada por la 74ª Asamblea General de la AMM, Kigali, Ruanda,...

Declaración de la AMM sobre Demencia

Adoptada por la 76.ª Asamblea General de la AMM, Oporto, Portuga...

Declaración de la AMM sobre la Carga global de enfermedades crónicas no transmisibles

Adoptada por la 62ª Asamblea General, Montevideo, Uruguay, octub...