Adoptada por la 72ª Asamblea General de la AMM (en línea), Londres, Reino Unido, octubre 2021

 

INTRODUCCION

Durante la última década, las presiones de suministro han resultado en escasez de ciertos medicamentos, incluidas las vacunas. En muchas situaciones, esta escasez es el resultado de la priorización de objetivos económicos por sobre la salud pública Estas carencias son perjudiciales para el bienestar del paciente, para la preservación de la salud pública y para la organización de los sistemas de salud.

El mundo está cambiando rápidamente: el progreso tecnológico, los avances radicales en la comunicación y el acceso a la información y el surgimiento de grandes corporaciones multinacionales están transformando el panorama global, incluida la industria farmacéutica. Desafortunadamente, algunos de estos cambios conducen a la producción y venta de productos médicos que no cumplen con los estándares de calidad, ya sea debido a procesos de fabricación o almacenamiento delictivas y la distribución de medicamentos de calidad inferior o falsificados.

Según el Sistema Mundial de Vigilancia y Monitoreo de la OMS para Productos Médicos de calidad Subestándar y Falsificados (GSMS), en países de ingresos bajos y medianos, aproximadamente un medicamento de cada 10 es deficiente o está falsificado. Esto no se limita a los medicamentos más caros o las marcas más conocidas, sino que también afecta a los productos genéricos y patentados en igual medida. Los medicamentos con mayor frecuencia denunciados son los antimicrobianos y los antipalúdicos.

La AMM reafirma su apoyo a la declaración sobre Medicamentos biosimilares, la resolución sobre Prescripción de medicamentos y la Sustitución de medicamentos y resistencia antimicrobiana.

El uso racional de medicamentos implica asegurar que la investigación, regulación, producción, distribución, prescripción, financiación, dispensación y administración adecuada de los medicamentos cumpla con criterios científicos, profesionales, económicos y sociales coherentes y racionales.

Desde el punto de vista sanitario, la escasez de medicamentos es inaceptable, ya que tiene un impacto negativo en la confianza de los pacientes, de los médicos, de los farmacéuticos y del sistema sanitario, genera inseguridad e incertidumbre al no garantizar la continuidad del tratamiento con el riesgo que esto supone.

A fin de combatir la intolerable pérdida de oportunidades que representa la escasez de medicamentos para los pacientes, que afecta la confianza de los ciudadanos en el sistema de salud, la AMM pide la implementación de las siguientes recomendaciones:

 

RECOMENDACIONES

Disponibilidad de los medicamentos

  1. Como desafío de salud pública y preocupación por la seguridad, la AMM insta a los gobiernos a mejorar la disponibilidad de los medicamentos:
  1. Los gobiernos nacionales y las autoridades reguladoras deben:
  • Establecer un organismo nacional encargado de recopilar y compartir información sobre la demanda y el suministro de medicamentos dentro de su jurisdicción, estableciendo normas y mecanismos que garanticen la continuidad del suministro de los medicamentos y evite el desabastecimiento.
  • Mejorar el monitoreo de la cadena de suministro de medicamentos, ya que las estructuras reguladoras débiles hacen que sea particularmente difícil aplicar buenas prácticas de distribución de productos médicos.
  • Crear estrategias de mitigación para abordar la dependencia excesiva de la fabricación extranjera de medicamentos, debido a la reubicación y centralización de la mayoría de las estructuras que producen ingredientes farmacéuticos activos utilizados en la composición de medicamentos esenciales.
  • Alentar a las autoridades sanitarias nacionales a tener suministros adecuados de medicamentos esenciales para minimizar el riesgo de deficiencias. De hecho, la crisis de salud de Covid-19 ha puesto de relieve la oferta limitada de existencias que los estados tenían y los ha obligado a organizar y restringir el acceso a ciertos medicamentos.
  • En caso de epidemias globales, agrupar la investigación científica y los ensayos clínicos, a fin de acelerar la elaboración de vacunas o tratamientos para erradicar la pandemia.
  • Apoyar iniciativas legislativas y reglamentarias que aseguren la capacidad nacional adecuada para producir productos farmacéuticos como una cuestión de bienestar público y seguridad nacional.
  • Identificar e introducir mecanismos sostenibles que aseguren el almacenamiento suficiente y el acceso a los medicamentos necesarios.
  • Promover la cooperación entre gobiernos en la prevención y gestión de la escasez de medicamentos y vacunas.
  • Alentar a los gobiernos a ser más directivos con respecto a la industria farmacéutica, específicamente en términos de ajustar las cuotas, expeditar las probaciones y la importación de medicamentos alternativos cuando las compañías farmacéuticas no pueden garantizar suministro continuo y adecuado de medicamentos.
  • Considerar la posibilidad de exigir a los fabricantes de medicamentos que establezcan un plan para la continuidad del suministro de medicamentos y vacunas vitales para evitar la escasez de producción siempre que sea posible.
  • Garantizar la transparencia, el intercambio y la disponibilidad de información de calidad procedente de fuentes fiables con el fin de generar confianza y facilidad de comunicación entre todas las partes interesadas, desde los profesionales de la salud hasta los pacientes. Cuando exista escasez, los gobiernos deben divulgar y enumerar todas las causas a todas las partes interesadas.
  • Permitir que los Estados miembros de la AMM adquieran, a través de contratos comunes de suministro, productos sanitarios y vacunas en cantidades suficientes durante una pandemia y así tener una mayor influencia en las negociaciones con los laboratorios.
  • Evitar el enfoque de «primero en llegar, primero en ser servido», especialmente durante una pandemia, que conduce a una competencia contraproducente que actúa en contra de la protección de la salud pública.
  • Permitir un nivel industrial de seguridad del suministro en consonancia con el despliegue del programa de Interpol de lucha contra la delincuencia farmacéutica.

Seguridad de los medicamentos

  1. El objetivo es establecer procesos de adquisición activos para garantizar la continuidad del suministro de medicamentos de calidad y garantizar su seguridad.
  1. Los elementos de los procesos de adquisiciones activos de alta calidad incluirían:
  • Cuantificación mejorada, incluida la previsión.
  • Comunicación directa entre las agencias de adquisiciones y los fabricantes en torno a cuestiones de capacidad sostenible.
  • Enfoques deliberados y considerados adaptados a la situación específica de cada producto (contratos a largo plazo, a corto plazo, fraccionados, etc.).
  • Precios responsables que valoren la calidad.
  • Contratación vinculante significativa.
  • Introducir marcos que limiten el acaparamiento innecesario de medicamentos, así como la eliminación innecesaria de los medicamentos no utilizados con el fin de mantener la calidad de sus propiedades farmacéuticas.
  • Alentar a los gobiernos a promover el intercambio público de información sobre los precios reales de los medicamentos. Las autoridades deben regular y limitar la posibilidad de acuerdos de descuento y precios confidenciales en la evaluación de métodos de medicamentos. El sistema debe ser más transparente en todos los ámbitos, incluida la evaluación de nuevos medicamentos.
  1. La AMM enfatiza que la calidad de los medicamentos es un imperativo de salud pública y recomienda que las asociaciones médicas nacionales y los médicos miembros deben:
  • Sensibilizar al público y a los profesionales sobre los productos falsificados y de calidad inferior.
  • Crear una lista de medicamentos «esenciales» que cumpla con los requisitos de salud del país.
  • Un sistema de alerta temprana, centrado en los medicamentos que salvan vidas y aquellos destinados a tratar enfermedades discapacitantes, especialmente aquellos con opciones terapéuticas alternativas limitadas o nulas. La activación de dicho sistema debería desencadenar una cadena de actividades requeridas para todas las partes interesadas pertinentes (titulares de autorizaciones de fabricación, mayoristas, farmacéuticos hospitalarios) con obligaciones de notificación, seguimiento estrecho y acciones de reparación.
  • Un escenario y planes de contingencia, probando la resiliencia de los sistemas de fabricación y supervisión a intervalos regulares, con estrategias de comunicación adecuadas hacia los diferentes grupos de interés.
  • Continua armonización de los estándares regulatorios en todos los países y más allá de cualquier región.
  • Colaboración proactiva y productiva entre todas las partes interesadas clave para prevenir la escasez de medicamentos y mitigar su impacto adverso en la atención al paciente.
  • Combatir, en consulta con las asociaciones de usuarios de servicios de salud, la cultura creciente de autodiagnóstico, prescripción y automedicación inapropiados, que puede dejar la cadena de suministro vulnerable a la intrusión de productos falsificados o no aprobados.
  • Evitar la prevalencia de medicamentos de calidad inferior con la implementación, la regulación y la aplicación de una buena fabricación respetuosa del medio ambiente (cGMPs), prácticas de almacenamiento y distribución y evitar la degradación de los medicamentos.
  • Instar a la industria farmacéutica a comprometerse y garantizar la continuidad del suministro de medicamentos, evitando la interrupción de cualquier tratamiento.
  1. La AMM insta a los gobiernos, en consulta con la asociación de usuarios de atención médica y otras partes interesadas, a hacer todo lo posible para garantizar que todos los pacientes conozcan la seguridad de los medicamentos.
  • A nivel internacional y en colaboración, los Ministerios de Salud y el Regulador de Medicamentos deben recomendar lo siguiente: Las asociaciones médicas nacionales deben oponerse activamente al desvío de medicamentos ilegales, la venta ilegal de medicamentos por Internet, la importación ilegal de medicamentos y su falsificación.
  • Mejorar la prevención y el monitoreo del mercado farmacéutico en línea a través de sistemas nacionales de regulación de las actividades de comercio en Internet.
  • Se deben adoptar regulaciones y mecanismos para cerrar de inmediato todos los sitios que ofrecen ilegalmente productos médicos que no son controlados por las autoridades estatales.
  • Mejorar la identificación y la denuncia de productos médicos falsificados en el mundo.
  • Lanzar campañas internacionales de prevención sobre los riesgos para la salud del uso de productos médicos falsificados para informar a las personas sobre los peligros de comprar medicamentos o productos presentados como tales en Internet (medicamentos falsos o falsificados, etc.).
  • Mejorar la detección y notificación de medicamentos falsificados y deficientes, incluidas las vacunas y otros productos médicos en todo el mundo. Los medicamentos falsificados y deficientes, incluidas las vacunas y otros productos médicos, deben ser denunciados de inmediato a las autoridades apropiadas cuando sean descubiertos. Los medicamentos falsificados o deficiente deben evitarse que estén en farmacias, hospitales y que no sean utilizados en pacientes de ninguna manera. Todos los efectos secundarios adversos de un medicamento falsificado y deficiente deben ser notificados por medio de un sistema eficaz y apropiado.
  • Fortalecer y alinear las normas internacionales contra los productos médicos falsificados para contrarrestar de manera efectiva los crecientes desafíos para los sistemas de gobernanza planteados por la globalización de los procesos de fabricación y las cadenas de suministro.

Crisis sanitaria del Covid-19

  1. La crisis sanitaria del Covid-19 pone de relieve las cuestiones esenciales de disponibilidad, calidad y seguridad de los medicamentos.
  1. El problema ya significativo de la disponibilidad, calidad y seguridad de los medicamentos ha sido claramente destacado por la crisis sanitaria del Covid-19. La importancia de estos problemas es aún mayor, a escala mundial, y la pandemia de Covid-19 está creando desafíos sin precedentes para las autoridades en todos los Estados. La pandemia está provocando un aumento muy acusado de la demanda de determinados medicamentos y una gran expectativa de medicamentos y vacunas específicos, lo que crea las condiciones para múltiples tensiones.
  1. El problema de la disponibilidad de medicamentos se pone de manifiesto, en particular, para los anestésicos y el tratamiento en cuidados intensivos, que han sido objeto de una entrega muy supervisada para evitar cualquier interrupción del suministro. La prescripción y dispensación de algunos otros medicamentos se ha reglamentado estrictamente con el fin de preservar los suministros para los enfermos crónicos.
  1. Como respuesta al acceso desigual a las vacunas, se debe desarrollar en el futuro la implementación del mecanismo COVAX para promover el acceso y distribución de vacunas, con el objetivo de proteger a las personas de todos los países.
  1. La OMS alerta y advierte a los consumidores, profesionales de la salud y autoridades sanitarias sobre la seguridad de los medicamentos: la creciente oferta de productos médicos falsificados en el contexto de la pandemia del COVID-19 se ve favorecida por estas perspectivas de escasez.
  1. En cuanto a la calidad de los medicamentos, la crisis de salud ha puesto de relieve los riesgos de la automedicación y la necesidad de que los Estados establezcan sistemas de información para la población. Las falsas esperanzas de una posible cura o prevención del COVID-19, que no han sido validadas científicamente, tienen graves consecuencias para la salud de las personas.
  1. Los intereses económicos o políticos no deben competir con la salud del público. Debe desarrollarse la puesta en común de los intereses de la salud pública, a fin de que los intereses económicos o políticos no sean la causa del fracaso en la gestión de la situación, de la escasez de existencias o de un comportamiento anticompetitivo.
  1. La evolución de la actual crisis sanitaria y, en particular, la llegada de nuevas variantes muestra que los Estados deben ser capaces de responder científicamente a esta evolución sin verse obstaculizados por normativas internacionales excesivamente restrictivas.

Adoptada por la 49ª Asamblea Médica Mundial, Hamburgo, Alemania, noviembre 1997,
enmendada por la 59a Asamblea General de la AMM, Seúl, Corea, octubre 2008,
por la 70ª Asamblea General de la AMM, Tiflis, Georgia, octubre 2019
y por la 72ª Asamblea General de la AMM (en línea), Londres, Reino Unido, octubre 2021

 

INTRODUCCIÓN

Durante siglos, mujeres y niñas de todo el mundo han sufrido desigualdad de género y un equilibrio desigual de poder entre los hombres y las mujeres. Los prejuicios históricos basados en el sexo, lo que ha llevado a que a las mujeres y las niñas se les restrinja el acceso, entre otras cosas, al empleo, la educación y la atención médica.

La desigualdad de género crea peligros en el tratamiento médico. Cuando no se ofrece tratamiento de igual calidad a ambos sexos y atención para los mismos problemas médicos o cuando no se tienen en cuenta diferentes manifestaciones de una enfermedad en función del sexo, los resultados de los pacientes se verán afectados.

Además, en algunos países, se ha impedido a las profesionales sanitarias femeninas, o se enfrentan a barreras para ejercer su profesión o ser ascendidas a puestos de liderazgo debido a creencias religiosas o culturales, o la discriminación por motivos de sexo y religión/etnia interrelacionados. La falta de representación y diversidad de género dentro de la profesión médica puede tener como consecuencia que las pacientes y sus hijos no tengan acceso igualitario a la atención médica.

La discriminación contra las niñas y las mujeres daña sus expectativas de salud. Sirve como barrera para acceder a los servicios de salud, afecta a la calidad de los servicios de salud proporcionados y refuerza la exclusión de la sociedad de las mujeres y las niñas. Por ejemplo, la educación de las niñas tiene un efecto positivo que incide en su salud y bienestar en la edad adulta. La educación también aumenta las probabilidades de que sus hijos sobrevivan a la infancia y contribuye al bienestar general de sus familias. En cambio, la discriminación por prácticas sociales, religiosas y culturales, que limitan la libertad de la mujer para tomar sus propias decisiones y tener acceso a oportunidades de empleo y a la salud, tiene un impacto negativo en las expectativas de salud.

Las leyes, políticas y prácticas nacionales también pueden fomentar y perpetuar la discriminación en los establecimientos de atención médica, prohibiendo o disuadiendo a las mujeres y las niñas de buscar la amplia gama de servicios de atención médica que puedan necesitar. La evidencia demuestra los efectos nocivos para la salud y los derechos humanos de dichas leyes. Por ejemplo, en algunos países y debido a las leyes nacionales, legislaciones o normas sociales, las mujeres y las niñas carecen de poder para tomar decisiones sobre su propio tratamiento médico, cirugía, embarazo o anticoncepción.

Abordar la discriminación en los establecimientos de atención médica contribuirá al logro de muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, garantizando que ninguna mujer ni niña se quede atrás. Es fundamental para asegurar el progreso hacia el ODS 3, buena salud y bienestar, lo que incluye lograr la cobertura universal de salud y poner fin a las epidemias de SIDA y tuberculosis; el ODS 4, educación de calidad; el ODS 5, igualdad de género y empoderamiento de la mujer; el ODS 8, trabajo decente y crecimiento económico inclusivo; el ODS 10, reducción de las desigualdades; y el ODS 16, paz, justicia e instituciones fuertes.

El género es un determinante social de la salud y los problemas de salud pueden manifestarse de manera diferente en hombres y mujeres. Es necesario abordar las diferencias en la salud y la atención médica desigual entre hombres y mujeres, incluidas tanto la dimensión biológica como la sociocultural.

El acceso a la atención médica, incluidas las estrategias tanto terapéuticas como preventivas, es un derecho humano fundamental. Esto impone al gobierno la obligación de garantizar que estos derechos humanos se respeten y protejan plenamente. Las desigualdades de género deben abordarse y erradicarse en todos los aspectos de la atención médica.

Se espera que el aprendizaje automático, los algoritmos predictivos y la inteligencia artificial (IA) en la atención sanitaria cambien drásticamente la forma de practicar y gestionar la asistencia sanitaria. Por ejemplo, la IA podría cambiar la forma de diagnosticar y tratar enfermedades como el cáncer. Sin embargo, incluso con la introducción de la IA en la asistencia sanitaria, las limitaciones de recursos pueden impedir que la mayoría de las mujeres del mundo accedan a dicha asistencia. Para no amplificar las desigualdades de género, la información que se programe en los algoritmos de inteligencia artificial que se creen para informar sobre los diagnósticos y la gestión médica debe tener en cuenta las consideraciones sanitarias específicas de las mujeres, por ejemplo, las mujeres pueden presentar síntomas diferentes a los de los hombres.

La Declaración de Ginebra de la AMM establece el respeto del médico por la dignidad humana y que este no debería permitir que surjan consideraciones sobre el género entre “mis deberes y mis pacientes”.

 

RECOMENDACIONES

Por lo tanto, la Asociación Médica Mundial insta a sus miembros constituyentes a:

  1. Promover el derecho humano a la salud igualitario para mujeres y niños.
  2. Condenar categóricamente las violaciones de los derechos humanos básicos de las mujeres y los niños, incluidas las violaciones derivadas de prácticas sociales, políticas, religiosas, económicas y culturales.
  3. Insistir en los derechos de todas las mujeres y niños a una atención médica completa y adecuada, especialmente cuando las restricciones religiosas, sociales y culturales o la discriminación puedan obstaculizar el acceso a dicha atención médica; y promover la salud y el acceso a la atención médica de las mujeres y los niños como derechos humanos.
  4. Abogar por la paridad de las primas y la cobertura de los seguros médicos para garantizar que el acceso de la mujer a la atención no se vea obstaculizado por gastos prohibitivamente elevados.
  5. Los gobiernos tienen la obligación de garantizar que la información que se programe en los algoritmos de inteligencia artificial que se están creando para informar sobre los diagnósticos y la gestión médica debe incluir una muestra representativa de datos de mujeres para garantizar que la brecha de desigualdad de género no se amplíe aún más.
  6. Garantizar el acceso universal a la atención médica sexual y reproductiva.
  7. Promover la prestación de la atención preconcepcional, prenatal y materna, y la atención posnatal, incluida la inmunización, la nutrición para un crecimiento adecuado y el desarrollo de la atención médica para los niños.
  8. Defender las oportunidades educativas, laborales y económicas para las mujeres y su acceso a la información sobre los servicios de atención médica y salud.
  9. Trabajar para lograr el derecho humano a la igualdad de género en cuanto a oportunidades y a la igualdad de género en cuanto a tratamientos.

 

Adoptada por la 72ª Asamblea General de la AMM (en línea), Londres, Reino Unido, octubre 2021

 

INTRODUCCIÓN

La cirugía y la anestesia incluyen todos los campos clínicos y todos los profesionales de salud que tratan enfermedades y patologías quirúrgicas. Esto comprende, entre otros: la anestesia, obstetricia y ginecología, y cirugía, incluidas todas sus subespecialidades. Históricamente han sido una parte desatendida de la salud mundial, con muy pocas inversiones realizadas en el desarrollo de sistemas de salud quirúrgica, mientras que una cuarta parte estimada de la carga de enfermedad en todo el mundo se puede atribuir a enfermedades quirúrgicas. Además, la mayoría de la población mundial carece de acceso a una atención quirúrgica segura, oportuna y asequible.

Se necesita una fuerza laboral de 20 médicos especialistas en cirugía, anestesia y obstetricia por cada 100 000 habitantes para proporcionar al 80 % de la población mundial de atención quirúrgica esencial y de urgencia en 2 horas. Esto incluye atención quirúrgica y obstétrica de urgencia, como cesáreas y atención quirúrgica para evitar la muerte y la discapacidad debidas a enfermedades que probablemente se beneficien de tratamientos quirúrgicos como lesiones, cataratas y cáncer. La mayoría de los países con ingresos bajos y medios (LMIC, por sus siglas en inglés) están muy por debajo de este objetivo, con una necesidad especialmente grande en las regiones más pobres del mundo.

La falta de cirujanos puede verse incrementada por la falta de igualdad de género en la fuerza laboral quirúrgica, lo cual sigue siendo un desafío. A pesar del hecho de que, en varios países, hay más mujeres que hombres estudiantes de medicina, los hombres aún superan a las mujeres en el personal quirúrgico.

La cirugía y la anestesia han resultado ser rentables, especialmente en los LMIC. Las intervenciones quirúrgicas son tan rentables como las intervenciones de salud pública comunes, como los mosquiteros contra la malaria, los medicamentos contra el VIH o las vacunas infantiles.

El 60 % de los pacientes con cáncer y el 80 % de los pacientes con traumatismos necesitarán alguna forma de intervención quirúrgica durante su tratamiento. Teniendo en cuenta que tanto las enfermedades no transmisibles (ENT), como las lesiones, están en aumento a nivel mundial, se espera que la demanda de cirugías siga aumentando.

En 2015, la Asamblea Mundial de la Salud reconoció la cirugía y la anestesia como un componente vital de la Cobertura Universal de Salud (UHC, por sus siglas en inglés) a través de su Resolución 68.15 “Fortalecimiento de la atención quirúrgica y de anestesia esencial y de urgencia como un componente de la cobertura universal de salud”.

RECOMENDACIONES

La AMM recomienda a las autoridades nacionales pertinentes:

  1. Integrar la atención quirúrgica y de anestesia de calidad en todos los niveles de la atención sanitaria, incluida la atención sanitaria primaria integral para realizar la UHC y los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030.
  1. Elaborar pautas y políticas específicas de cirugía y anestesia para sus respectivos países o jurisdicciones adapatadas a las capacidades y necesidades locales.
  1. Implementar políticas que regulen el proceso de delegación de funciones en cirugía y anestesia de acuerdo con la “Resolución de la AMM sobre la delegación de funciones de la profesión médica”.
  1. Invertir en el fortalecimiento del sistema sanitario y abogar por una mayor financiación y asignación presupuestaria para la cirugía y la anestesia sin privar a otras áreas de los fondos necesarios.
  1. Proporcionar la infraestructuranecesaria y las líneas de adquisición para que los hospitales brinden atención quirúrgica de alta calidad y segura.
  1. Garantizar que las políticas, incluidas las políticas sobre narcóticos y medicamentos regulados, no obstaculicen el acceso a los medicamentos quirúrgicos necesarios, incluidos los analgésicos y los agentes anestésicos.
  1. Establecer protocolos o pautas clínicos a nivel nacional o regional para garantizar que el uso de antibióticos en el período perioperatorio se prescriba de manera sostenible y de acuerdo con las pautas de resistencia a los antimicrobianos aplicables.
  1. Incluir la atención quirúrgica y las enfermedades en los cursos pertinentes para luchar contra el dogma de que la atención quirúrgica es demasiado costosa y compleja para brindarla en entornos con bajos recursos.
  1. Ofrecer oportunidades de formación de residencia equitativas a estudiantes de medicina de ambos sexos formados localmente en el campo de la cirugía y la anestesia, en función de las necesidades científicamente proyectadas del país o región de acuerdo con la “Declaración de la AMM sobre igualdad de género” y contribuyendo a la estrategia global sobre recursos humanos para la salud: la fuerza laboral de 2030.
  1. Permitir horarios de formación y de trabajo adaptables para acomodar la necesidad potencial de permiso por maternidad o paternidad, y un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal, a fin de que los programas de formación sean más accesibles independientemente de las responsabilidades familiares del estudiante.
  1. Buscar la colaboración regional, nacional e internacional en ámbitos clínicos y académicos donde pueda faltar capacidad y recursos locales y donde la exposición pueda ser beneficiosa para quienes estén en áreas sin alta capacidad o recursos, como por ejemplo a través de programas de intercambio bilateral.
  1. Apoyar iniciativas nacionales de recogida de datos quirúrgicos, desarrollo de capacidades, defensa, planificación de políticas y fortalecimiento de sistemas a través de la colaboración con ONG, universidades, iniciativas de investigación, comunidades locales, bancos de desarrollo, organizaciones gubernamentales y otras partes interesadas.

La AMM se compromete a:

  1. Defender en foros locales, regionales y nacionales e internacionales a favor de la atención centrada en las personas, creando un sistema de atención sanitaria más holístico, ofreciendo servicios médicos, quirúrgicos, de salud mental y de salud preventiva en un enfoque nacional de UHC, apoyando la Resolución 68.15 de la WHA sobre “Fortalecimiento de la atención quirúrgica esencial y de urgencia y anestesia como un componente de la cobertura universal de salud”.

Adoptada por la 72ª Asamblea General de la AMM (en línea), Londres, Reino Unido, octubre 2021

 

INTRODUCCIÓN

El sol es una gran fuente de beneficios para la salud, pero es importante conocer tambien sus consecuencias perjudiciales. La prevención de los efectos nocivos del sol en nuestra piel es aconsejable en todas las edades especialmente en la población infantil y adolescente. Las radiaciones solares generan una serie de efectos biológicos y fisiológicos en el organismo que dependen de la proporción y de la intensidad de la radiación y que tienen efectos beneficiosos, como estimular la sintesis de vitamina D, favorecer la formación de hemoglobina y mejorar el estado anímico y otros efectos son perjudiciales, agresivos para la piel,  como los eritemas, el fotoenvejecimiento de la piel y lesiones precancerosas o cancerosas. Las dermatosis producidas o agravadas por la exposición al sol constituyen un problema de salud al que los profesionales sanitarios se enfrentan con mayor frecuencia.

La luz solar se compone de un espectro continuo de radiación electromagnética dividido en tres grupos principales: ultravioleta (UV), visible e infrarrojo. La radiación UV se clasifica como UV-A, UV-B y UV-C.

La intensidad de la radiación UV puede medirse mediante instrumentos estandarizados internacionales como el índice UV que mide la fuerza de la radiación solar UV que produce quemaduras solares en un lugar y tiempo particular.

La radiación solar UV, especialmente a través de UV-B, es un factor causal extremadamente importante, pero descuidado, para los cánceres de piel no melanoma y los melanomas, para las patologías oculares (por ejemplo, cataratas, degeneración macular relacionada con la edad) y efectos nocivos sobre el sistema inmunitario. Las quemaduras de sol recurrentes y graves son un factor de riesgo para el cáncer de piel no melanoma.

La radiación solar también puede inducir la aparición y exacerbación de la dermatitis actínica crónica (DAC) y el melasma.  La luz azul también juega un papel importante en la patogenia del melasma, por lo que se debe abogar por la fotoprotección de amplio espectro y reducir la ingesta de alimentos y medicamentos fotosensibles.

El riesgo de cáncer de piel difiere según el tipo de piel y también la duración y la intensidad de la exposición. La exposición crónica, a largo plazo, acumulativa a los rayos UV se asocia con la queratosis actínica y los carcinomas de células escamosas, mientras que la exposición intermitente a los rayos UV de alta intensidad, especialmente a edades tempranas, se asocia con carcinomas de células basales y melanomas. Por lo tanto, la fotoprotección es importante en edades tempranas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer, planteó el problema de que la radiación solar UV es un carcinógeno desde 1992 y clasificó la radiación solar UV como un carcinógeno del grupo 1 (carcinógeno para los humanos) desde 2012. Otros carcinógenos conocidos del grupo 1 son el plutonio, el amianto y la radiación ionizante.

Además, los cambios climáticos actuales y la reducción de la capa de ozono en aproximadamente un 4% por década desde los años 70 condujeron a una filtración disminuida de la radiación UV-A y UV-B y un aumento de la radiación UV que alcanza el nivel del mar.

En consecuencia, la tasa de incidencia de cáncer de piel melanoma y no melanoma está aumentando en todo el mundo.

La evidencia de la OMS indica que cuatro de cinco casos de cáncer de piel pueden evitarse significativamente y recomienda medidas de precaución simples, como limitar la exposición a los rayos UV en el sol del mediodía, usar ropa protectora contra los rayos UV y sombreros o usar protectores solares minerales.

La fotoprotección también incluye productos de maquillaje, gafas de sol y parabrisas.

La OMS reconoce que si bien la protección contra la exposición a los rayos UV se recomienda a nivel mundial, existe la preocupación de que la falta de exposición a los rayos UV pueda reducir los efectos beneficiosos de la vitamina D, incluido su potencial para disminuir el riesgo de algunos tipos de cáncer.

 

RECOMENDACIONES

  1. La fotoprotección es una estrategia de prevención clave, ya que la mayoría de los cánceres de piel se producen debido a la exposición de los rayos solares UV.

Los gobiernos nacionales deben:

  1. Informar a los profesionales sanitarios sobre las caracteristcicas que debería cumplir el fotoprotector ideal (aquel que proporcione una proteccion equilibrada, segura y fácil de usar), con la finalidad de evitar la variablilidad entre los productos suministrados por los laboratorios, asi como mejorar la seguridad y el etiquetado de los fotoprotectores.
  1. Reconocer la exposición a los rayos UV solares como factor de riesgo importante para desarrollar cáncer de piel. La exposición a los rayos UV también es la principal causa de algunas enfermedades oculares y disfunciones del sistema inmunitario.
  1. Trabajar juntos en el desarrollo de una Acción mundial para la prevención del cáncer de piel basada en medidas fotoprotectoras. Esto debe incluir medidas contra el cambio climático a fin de ayudar a disminuir el daño de la radiación ultravioleta.
  1. Respaldar campañas de detección de cáncer de piel.
  1. Reconocer la prevención del cáncer de piel como una prioridad nacional de salud.
  1. Mejorar el examen de detección, el diagnóstico y el tratamiento del cáncer de piel y cuando sea posible.
  1. Incluir todas las formas de cáncer de piel en todos los Registros Nacionales de Cáncer y mejorar la notificación de los cánceres de piel por UV y la legislación para proteger a los trabajadores que laboran en el exterior (reconocer las enfermedades profesionales).
  1. Trabajar con las partes interesadas pertinentes que vinculen y organicen campañas de prevención de cáncer de piel en línea y sin conexión y programas educativos sobre protección solar, con enfoque principal en el grupo de edad de 0 a 18 años, para crear conciencia sobre este peligro para la salud y para instar a los jóvenes a tener comportamientos adecuados (utilización de sombreros y ropa de protección, bloqueador solar, evitar la exposición excesiva) y la elección de estilos de vida saludables.
  1. Promover políticas para luchar contra el cambio climático y la contaminación del aire.
  1. Considerar el impacto medioambiental de los fotoprotectores.

 

La AMM y sus miembros deben:

  1. Interactuar con el personal de salud y los médicos que tienen un papel importante en la educación y empoderamiento de sus pacientes en la promoción de la conciencia sobre el cáncer de piel, las medidas de protección solar y el acceso del paciente a exámenes de detección, diagnóstico y tratamiento.
  1. Formar a los médicos de atención primaria y medicina del trabajo para que reconozcan y deriven a los pacientes con lesiones sospechosas a los dermatólogos.
  1. Respaldar la elaboración de directrices nacionales sobre medidas fotoprotectoras y continuar la investigación científica en este campo para obtener el equilibrio entre riesgo y beneficios de la exposición a radiación UV.
  1. Apoyar la investigación y la creación de vestimenta protectora adecuada.
  1. Promover campañas para instar a la medición de la exposición a rayos UV en cada país.
  1. Respaldar las campañas en los medios y programas educativos que expliquen los efectos nocivos de la exposición a los rayos UV y las medidas fotoprotectoras óptimas destinadas a los más vulnerables, como los niños y adolescentes, personas con piel clara, trabajadores en exteriores (agricultura, pesca, construcción, forestal, deportistas, personal en piscinas).
  1. Promover la educación para la salud y la información sobre los fotoprotectores y los habitos mas recomendables y saludables para la piel, instaurando habitos correctos de fotoproteccion que posibiliten disfrutar de los efectos beneficiosos del sol y evitar el daño solar.

 

Los médicos a nivel individual deben:

  1. Asesorar a los pacientes sobre los principales riesgos para la salud asociados con la exposición excesiva a la radiación solar UV, informar a los pacientes sobre las medidas de protección solar apropiadas (cubrirse la piel, protector solar y gafas de sol) y alentar a los pacientes a realizar revisiones médicas periódicas y participar en campañas de detección de cáncer de piel, cuando existan.
  1. Aconsejar a los pacientes a autoexaminarse la piel.
  1. Asesorar a los pacientes a riesgo (por ejemplo los pacientes que toman medicamentos contra el cáncer) para que entiendan la suma importancia de las medidas de protección.
  1. Asesorar a los empleadores sobre la luz UV como un riesgo para la salud en el trabajo.

Adoptada por la 71ª Asamblea General de la AMM (en línea), Córdoba, España, octubre 2020

 

INTRODUCCION

En 2017 se realizaron casi 140.000 trasplantes de órganos sólidos en el mundo. Aunque es una cifra impresionante, esta actividad apenas cubre el 10% de las necesidades globales de trasplantes. La disparidad entre la oferta y la demanda de órganos ha llevado a la emergencia de delitos relacionados con los trasplantes tales como la trata de personas con fines de extracción de órganos   y el tráfico de órganos humanos.

Estos delitos violan los derechos humanos fundamentales y plantean graves riesgos para la salud tanto individual como pública. Se desconoce el verdadero alcance de los delitos relacionados con los trasplantes, pero se estima que entre el 5% y el 10% de los trasplantes a nivel mundial tienen lugar en el contexto del comercio internacional de órganos, que a menudo implica el turismo de trasplantes a destinos donde las leyes contra la venta y compra de órganos humanos son inexistentes o están mal aplicadas. La trata de personas con fines de extracción de órganos y el tráfico de órganos humanos también puede darse dentro de los límites de una jurisdicción determinada, sin incluir viajes para trasplantes. En todos los casos, los sectores más vulnerables de la población a menudo se convierten en víctimas de explotación y coacción.

Preocupada por la creciente demanda de órganos y por las prácticas poco éticas emergentes en el campo, la Organización Mundial de la Salud ha llamado a los gobiernos y a los profesionales de la salud a buscar la autosuficiencia en el trasplante, a través de estrategias dirigidas a disminuir la carga de enfermedades tratables con trasplante y estrategias para aumentar la disponibilidad de órganos, maximizar la donación de los fallecidos y garantizar la protección de los donantes vivos. El progreso hacia la autosuficiencia en el trasplante es consistente con el establecimiento de acuerdos de cooperación oficiales entre los países a fin de intercambiar órganos o facilitar el acceso de los pacientes a programas de trasplantes que no existen en sus países. Los acuerdos entre países deben estar basados en los principios de justicia, solidaridad y reciprocidad.

El progreso hacia la autosuficiencia en el trasplante es la mejor estrategia a largo plazo para prevenir los delitos relacionados con los trasplantes.

La característica distintiva de los delitos relacionados con los trasplantes es la necesaria participación de los profesionales de la salud. Es precisamente esto lo que ofrece la oportunidad única para prevenir y combatir estos delitos. Los profesionales de la salud son clave en la evaluación de potenciales parejas de donantes vivos y receptor, siendo también los que atienden a pacientes desesperados y vulnerables en riesgo de involucrarse en actividades ilícitas de trasplante. Además, debido a que los pacientes que reciben un trasplante requieren atención especializada a largo plazo, los médicos deben enfrentarse al desafío que supone prestar asistencia a los pacientes que han recibido un órgano a través de medios ilícitos cuando descubren redes de tráfico.

Organizaciones internacionales tales como el Consejo de Europa, la Unión Europea  y Naciones Unidas, así como plataformas profesionales internacionales, han elaborado tratados, resoluciones y recomendaciones para luchar conjuntamente contra los delitos relacionados con los trasplantes.

La AMM enfatiza la responsabilidad de los médicos en la prevención y la lucha contra la trata de personas con fines de extracción de órganos y el tráfico de órganos y el importante papel que desempeñan los médicos y otros profesionales de la salud en ayudar a las organizaciones internacionales, asociaciones médicas y los legisladores a luchar contra estas actividades delictivas.

En la lucha contra los delitos relacionados con el trasplante es de suma importancia que los principios de transparencia de la práctica, trazabilidad de órganos y continuidad de la atención estén garantizados para cada procedimiento de trasplante realizado a nivel nacional o en el extranjero.

La AMM reafirma su Declaración sobre la Donación de órganos y tejidos y su Declaración de Sídney sobre la Certificación de la muerte y la recuperación de órganos. Condena toda forma de trata de personas con el objetivo de extirpar órganos y traficar órganos humanos, la AMM pide la aplicación de las siguientes recomendaciones.

RECOMENDACIONES

Responsables de políticas e involucrados en salud:

  1. Los gobiernos deben crear, implementar y hacer cumplir estrictamente los marcos legislativos que prohíban y penalicen la trata de personas con el objetivo de extirpar órganos y traficar órganos humanos, que incluya disposiciones para prevenir y proteger a sus víctimas.
  2. Los gobiernos deberían considerar la posibilidad de ratificar o adherirse a la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional y el Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, Especialmente Mujeres y Niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, así como la Convención del Consejo de Europa contra el Tráfico de Órganos Humanos. También deberían considerar la posibilidad de cooperar con las organizaciones internacionales existentes para una lucha más eficaz contra los delitos relacionados con los trasplantes. La AMM debería desempeñar un papel de liderazgo a la hora de influir en las prácticas éticas en materia de donación y trasplante.
  3. Las autoridades de salud deben crear y mantener registros para registrar información sobre cada procedimiento de recuperación y trasplante de órganos, así como información sobre los resultados de donantes vivos y receptores de órganos, para garantizar la trazabilidad de los órganos, con el debido respeto a la confidencialidad profesional y la protección de datos personales. Los registros deben estar diseñados para registrar información sobre los procedimientos que se llevan a cabo dentro de un país y sobre los procedimientos de trasplante y donación en vida de residentes de ese país realizados en otros destinos.
  4. Se alienta a los países a contribuir periódicamente con esta información al Observatorio Mundial sobre Donación y Trasplantes creado en colaboración con la Organización Mundial de la Salud.
  5. Las autoridades sanitarias y las asociaciones médicas deben garantizar que todos los profesionales de la salud reciban orientación sobre la naturaleza, alcance y consecuencias de los delitos relacionados con los trasplantes y también sobre sus responsabilidades y deberes en la prevención y lucha de estas actividades delictuales y en los medios para hacerlo.
  6. Dado que la autosuficiencia es la mejor estrategia a largo plazo para prevenir los delitos relacionados con los trasplantes, las autoridades sanitarias y los responsables políticos deben desarrollar estrategias preventivas para disminuir la carga de enfermedades tratables con trasplantes y aumentar la disponibilidad de órganos.
  7. El aumento de la disponibilidad de órganos debe basarse en la creación y la optimización de programas de donación de fallecidos éticamente sólidos, tras la certificación de la muerte por criterios neurológicos y circulatorios. Es de destacar que la donación después de la certificación de la muerte por criterios circulatorios se acepta en un número limitado de países. Los gobiernos deben investigar si la donación después de la certificación circulatoria de muerte es una práctica aceptable dentro de su comunidad y, si este es el caso, considerar introducirla dentro de su jurisdicción.
  8. Además, los gobiernos deben crear y optimizar programas de donación en vida basados en estándares éticos y profesionales reconocidos, y garantizar la debida protección y seguimiento de los donantes vivos.
  9. Las autoridades sanitarias y las aseguradoras no deben reembolsar los gastos derivados de los procedimientos de trasplante llevados a cabo en un contexto delictivo. Sin embargo, sí se debe asumir el gasto de medicación y la asistencia sanitaria posterior al trasplante deben ser cubiertas en las mismas condiciones que cualquier otro paciente de trasplante.
  10. Las autoridades también deben garantizar que se brinde atención médica y psicosocial a las víctimas de la trata de personas con el propósito de extirpar órganos y tráfico de órganos humanos. Se debe considerar la compensación efectiva de estas personas por los daños sufridos.
  11. Las asociaciones médicas deben abogar y colaborar con las autoridades en la creación de marcos que permitan a los profesionales de la salud denunciar ante las autoridades correspondientes los casos confirmados o sospechosos de trata de personas con fines de extracción de órganos y de tráfico de órganos humanos. Las asociaciones médicas nacionales deben abogar por la capacidad de los profesionales de la salud de denunciar las sospechas de trata de personas de forma anónima si es necesario para proteger la seguridad del denunciante. Si es necesario, la notificación de estos casos de tratas debe ser una excepción permitida a la obligación del médico de mantener la confidencialidad del paciente.

Médicos y otros profesionales de la salud:

  1. Los médicos nunca deben realizar un trasplante con un órgano que se haya obtenido ilícitamente. Si existen dudas razonables sobre el origen de un órgano, el órgano debe descartarse. Si se le pide a un médico o cirujano que realice un trasplante con un órgano que se haya obtenido mediante una transacción financiera, sin el consentimiento válido del donante o la autorización requerida en una determinada jurisdicción, éste debe abstenerse de realizar el trasplante y debe explicar los motivos al posible receptor.
  2. Los médicos que participen en la evaluación preoperatoria de posibles donantes vivos no sólo deben valorar la idoneidad médica del individuo, sino también tratar de asegurarse de que la persona no haya sido sometida a ningún tipo de coacción o esté participando en el procedimiento por razones económicas u otras ventajas similares. También debe analizarse la legitimidad de la relación donante-receptor y asegurarse la motivación altruista de la donación. Los médicos deben estar particularmente atentos frente a potenciales signos de alarma que sugieran un delito. Se debe tener una consideración especial con los donantes vivos no residentes, que son particularmente vulnerables. Evaluar la validez de su consentimiento para la donación puede ser especialmente complejo por razones lingüísticas, culturales y de otro tipo, al igual que asegurar el seguimiento apropiado que se les ofrece. Cuando sea apropiado, se debe identificar un médico de referencia en el país de origen del donante vivo y en el del receptor previsto.
  3. Los médicos nunca deben promover o facilitar la participación de los pacientes en delitos relacionados con los trasplantes. Además, deben proporcionar a sus pacientes información relacionada con los riesgos que estas actividades representan para su salud, la de sus seres queridos y de manera más general la salud pública. Los pacientes también deben comprender que estas actividades implican la explotación de personas vulnerables que pueden sufrir complicaciones médicas y psicosociales. De esta manera, los profesionales pueden disuadir a estos pacientes de participar en actividades ilícitas de trasplante.
  4. Los médicos tienen el deber de atender a los pacientes trasplantados, incluso si el órgano se ha obtenido ilícitamente. Si un médico tiene objeciones éticas o morales para atender a un paciente que ha recibido un órgano ilícito, debe hacer lo necesario para derivarlo a otro médico.
  5. Los médicos deben contribuir a garantizar la transparencia de prácticas y la trazabilidad de los órganos. Cuando los pacientes que han tenido una donación o un trasplante en el extranjero soliciten un seguimiento en su país de residencia, debe registrarse toda la información relevante en los registros nacionales de trasplantes y notificarse a las autoridades sanitarias, como se haría con los trasplantes realizados dentro del sistema nacional de trasplantes.
  6. El médico es responsable de aumentar el número de donantes fallecidos para satisfacer las necesidades de trasplante de los pacientes. Los médicos tienen también un deber con los posibles donantes de órganos, considerando y facilitando la donación de órganos si está en consonancia con los valores y principios del paciente. La donación debe ofrecerse por norma como una opción al final de la vida, siempre de manera respetuosa, teniendo en cuenta la cultura y la religión del donante potencial y su reemplazante. Se debe considerar la donación al final de la vida tanto en pacientes adultos como pediátricos. Deben ser profesionales experimentados y capacitados los que informen sobre este tema.
  7. Los médicos deben promover la investigación en el campo de la donación y el trasplante, en particular la investigación dirigida a aumentar la disponibilidad de órganos para trasplante, mejorar los resultados de los órganos trasplantados e identificar estrategias alternativas de reemplazo de órganos, como en el caso de los órganos bioartificiales.

 

Adoptada por la 71ª Asamblea General de la AMM (en línea), Córdoba, España, octubre 2020

INTRODUCCION

La hipertensión es el factor de riesgo más importante para la muerte cardiovascular a nivel mundial. Representa más muertes por enfermedades cardiovasculares que cualquier otro factor de riesgo modificable. Más de la mitad de las personas que mueren de enfermedad coronaria y de infarto tenían hipertensión. “A medida que las poblaciones envejecen, adoptan estilos de vida más sedentarios y aumentan su peso corporal, la prevalencia de la hipertensión en todo el mundo seguirá aumentando”.

La hipertensión no controlada es una causa importante de infarto y otras afecciones crónicas comórbidas, como insuficiencia renal, insuficiencia renal, pérdida de visión o deterioro cognitivo leve. Debido a que la hipertensión puede ser asintomática, a menudo puede no diagnosticarse.

En 2010, la hipertensión surgió como el principal factor de riesgo para la carga de enfermedad en todas las regiones del mundo. Además, la presión arterial sistólica elevada (PAS) es el principal riesgo de salud mundial. El Plan de Acción Mundial de la OMS para la prevención de enfermedades no transmisibles exige una reducción del 25% en la prevalencia de presión arterial elevada para 2025.

Prevalencia

La prevalencia mundial de la hipertensión ha crecido significativamente en las últimas cuatro décadas y la mayoría de las personas con hipertensión no logran un control óptimo.

Es preocupante la creciente disparidad en la prevalencia de hipertensión entre los países de ingresos altos y bajos/medios. Casi el triple de personas con hipertensión viven en países de ingresos bajos/ medios (1.04 mil millones) que en países de altos ingresos. Los países de bajos ingresos en el sur de Asia, África subsahariana y Europa central y oriental se ven particularmente afectados. Además, la prevalencia de presión arterial elevada fue más alta en ciertas regiones de África para ambos sexos.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo de hipertensión son variables que aumentan la probabilidad de desarrollar la enfermedad. Los factores de riesgo incluyen lo siguiente:

  • Estilo de vida/alimentación: la falta de opciones de alimentos saludables, la falta de acceso a vecindarios seguros para hacer ejercicio y los hábitos de vida poco saludables pueden aumentar el riesgo de hipertensión. Los hábitos de vida poco saludables incluyen los patrones de alimentación poco saludables, como comer demasiado sodio y alimentos altamente procesados, beber demasiado alcohol y estar físicamente inactivo.
  • Edad: la presión arterial (PA) tiende a aumentar con la edad. Sin embargo, el riesgo de hipertensión está aumentando en niños y adolescentes, posiblemente debido al aumento en el número de niños y adolescentes con sobrepeso u obesidad.
  • Situación socioeconómica: en los países de altos ingresos, la mayor carga absoluta de la enfermedad de hipertensión se encuentra en los grupos de edad de 60 años y mayores, mientras que en los países de ingresos bajos/medios, la mayor carga absoluta está en los grupos de mediana edad, como 40 a 59 años. La prevalencia estandarizada por edad de la hipertensión es mayor en los países de ingresos bajos/medios que en los países de ingresos altos.
  • Sexo: antes de los 55 años, los hombres son más propensos que las mujeres a desarrollar hipertensión. Después de los 55 años, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de desarrollarlo.
  • Genética/Historia familiar: La investigación ha identificado muchas variaciones genéticas asociadas con pequeños aumentos en el riesgo de desarrollar hipertensión. Algunas personas están genéticamente predispuestas a la sensibilidad al sodio en la alimentación.

Medición precisa de la presión arterial

La medición precisa de la PA, tanto en el entorno clínico como en el hogar, es esencial para el diagnóstico y el tratamiento de la hipertensión. En muchos países, las pautas clínicas nacionales  recomiendan cómo lograr una medición precisa de la PA y ofrecen recomendaciones de mejores prácticas.

Consecuencias de las políticas

Las políticas y acciones a nivel mundial, nacional y local son necesarias para reconocer y combatir la hipertensión. Se necesita mucho esfuerzo en todo el mundo para mejorar la conciencia, el tratamiento y el control de todas las poblaciones. Las pautas actuales para diagnosticar y tratar la hipertensión, y la orientación basada en la evidencia sobre la importancia de una medición adecuada de la PA, ofrecen pilares para las políticas nacionales sobre la medición y el control de la PA. La implementación puede tener un progreso significativo hacia la disminución de la prevalencia de hipertensión a nivel mundial y mejorar los resultados de los pacientes. Para abordar los factores de riesgo para la hipertensión, las políticas también deben incluir los factores socioeconómicos, estilos de vida y alimenticios que contribuyen a la aparición de la enfermedad.

RECOMENDACIONES

  1. La Asociación Médica Mundial recomienda a los gobiernos nacionales:
  • Reconocer la hipertensión como el factor de riesgo más importante para las enfermedades cardiovasculares y la muerte.
  • Declarar que el control de la hipertensión es una prioridad nacional de salud.
  • Apoyar campañas para aumentar la conciencia pública sobre la hipertensión, incluido el reconocimiento de la naturaleza generalizada y asintomática y los riesgos de contribuir al desarrollo de enfermedades graves.
  • Implementar recursos adecuados para mejorar la conciencia, el diagnóstico, la medición y el manejo de la hipertensión.
  • Formular estrategias específicas para países que aborden los factores de riesgo para la hipertensión y aboguen para mejorar la conciencia, el diagnóstico, la medición y el manejo.
  • Promover las recomendaciones adoptadas por la AMM estipuladas en la Declaración sobre Disminución del consumo de sal en la alimentación.
  1. La Asociación Médica Mundial recomienda a sus miembros constituyentes:
  • Abogar a nivel internacional, nacional y local para promover el conocimiento de la hipertensión, estilos de vida saludables y el acceso del paciente al diagnóstico y tratamiento de la hipertensión, incluidos los medicamentos. Esto incluye apoyar el concepto de que los determinantes sociales de la salud son parte de la prevención de la enfermedad de hipertensión.
  • Reconocer y apoyar las pautas y estrategias nacionales para medir la PA con precisión.
  • Apoyar el intercambio de investigación, información, herramientas y otros recursos sobre hipertensión entre los equipos de atención médica y los pacientes.
  • Apoyar la elaboración de planes de estudios médicos que respondan a las necesidades sociales de hipertensión con un enfoque en la capacitación de atención primaria basada en la comunidad y las habilidades de medición y manejo de la PA.
  • Promover la investigación de las causas, los mecanismos y el tratamiento eficaz de la hipertensión.
  • Abogar por la disponibilidad sostenida de medicamentos antihipertensivos.
  1. La Asociación Médica Mundial recomienda que los médicos:
  • Enfaticen los factores de riesgo para la hipertensión y las maneras de mitigarlos, con especial atención a la prevención y tratamiento en las poblaciones de alto riesgo.
  • Enfaticen la atención en equipo para ayudar a prevenir, y cuando haya sido diagnosticada por un médico, tratar la hipertensión.
  • Implementen las mejores prácticas y técnicas de medición de la PA, incluida la capacitación y el perfeccionamiento de todos los miembros del equipo de salud.
  • Promuevan el cumplimiento del tratamiento de la hipertensión del paciente, facilitando el autocontrol continuo de la PA del paciente y su participación en la atención del paciente.

Adoptada por la 71ª Asamblea General de la AMM (en línea), Córdoba, España, octubre 2020

Introducción

La edición del genoma, posible gracias a avances científicos recientes, puede generar inserciones y supresiones focalizadas en el ADN e incluso puede ofrecer una precisión suficiente para modificar un par con base simple en el genoma de un organismo. La investigación científica básica sobre la edición del genoma ahora es una realidad en los laboratorios a nivel mundial.

La edición del genoma también avanza rápidamente, con ensayos clínicos en curso para la prevención y el tratamiento de diversas enfermedades. Estos ensayos, actualmente en sus primeras etapas, involucran células somáticas (células no reproductivas) y no se anticipa que introduzcan cambios genéticos que se traduzcan en descendencia o en células de la línea germinal (reproductiva).

Aunque la edición del genoma tiene un gran potencial para mejorar la vida humana, la tecnología plantea preocupaciones de seguridad, éticas, legales y sociales, en particular en un entorno en el que las regulaciones y la orientación ética están más retrasadas que los avances tecnológicos.

Las preocupaciones de seguridad de la edición del genoma incluyen el riesgo de efectos pleiotrópicos involuntarios o imprevistos fuera del objetivo (ediciones en el lugar equivocado), modificaciones no deseadas en el objetivo (ediciones imprecisas) y mosaicismo (cuando sólo algunas células llevan la edición) y respuestas inmunológicas anormales.

Los problemas éticos de la edición del genoma incluyen la inquietud de que el uso de la edición puede progresar a usos para fines no terapéuticos y de fortalecimiento, en lugar de objetivos terapéuticos, es decir, mejorar la salud o curar enfermedades. También existe la preocupación de que las modificaciones germinales puedan crear clases de individuos definidos por la calidad de su genoma modificado y dar paso posiblemente a la eugenesia, lo que podría exacerbar las desigualdades sociales o ser utilizado de manera coercitiva.

El efecto de los cambios epigenómicos es impredecible y existe inquietud sobre cómo afectará esto a los sistemas biológicos saludables existentes, incluidas las interacciones con otras variantes genéticas y las normas sociales. Una vez introducidas en la población humana, las alteraciones genéticas serían difíciles de eliminar y no permanecerían dentro de una sola comunidad o país. Los efectos podrían permanecer inciertos para muchas generaciones posteriores, durante ese tiempo las modificaciones perjudiciales podrían dispersarse por toda la población.

Las cuestiones legales incluyen proporcionar claridad para la gestión de riesgos y la asignación de deberes y responsabilidades, particularmente cuando las modificaciones pueden pasar a las generaciones posteriores. También existen riesgos, tanto legales como éticos, involucrados en la proliferación de kits CRISPR (repeticiones palindrómicas cortas agrupadas y espaciadas regularmente) no validados que permiten a las personas realizar la edición de genes de forma independiente en un entorno doméstico.

A nivel social, los debates giran en torno a la preocupación de que el acceso a la edición del genoma beneficiosa será desigual (por ejemplo, sólo los ricos tendrán acceso) y que aumentará las disparidades existentes en salud y atención médica.

La AMM reafirma los principios estipulados en la Declaración de Reikiavik sobre las consideraciones éticas del uso de la genética en la salud, Declaración de Taipei sobre las consideraciones éticas de las bases de salud y los biobancos y la Declaración de Helsinki y presenta las siguientes recomendaciones:

RECOMENDACIONES

  1. La edición del genoma humano, como cualquier otra intervención médica, debe ser implementada conforme a evidencia apropiada recopilada por medio de estudios de investigación bien realizados y aprobados éticamente.
  2. Cuando se considere el uso de células germinales para la investigación, la edición de la línea germinal debe permitirse sólo dentro de un marco ético y legal separado, distinto del marco ético y legal aplicado a la edición del genoma somático.
  3. Los gobiernos deben:
  • Crear marcos regulatorios sólidos y aplicables para la edición del genoma en sus propios países.
  • Instar al desarrollo continuo de un consenso internacional, basado en la ciencia y la ética, para determinar aplicaciones terapéuticas permisibles de la edición del genoma germinal.
  1. Los miembros constituyentes de la AMM deben:
  • Conocer los avances en investigación en medicina genómica e informar a sus miembros sobre los avances científicos en la edición del genoma.
  • Abogar por la investigación para comprender (i) los beneficios y riesgos de la edición del genoma humano y (ii) Los aspectos sociopolíticos, éticos y legales de la edición de la línea germinal humana y iii) la necesidad de la participación del médico en la edición terapéutica del genoma.
  • Establecer y promover las pautas éticas para la edición del genoma para sus miembros, teniendo en cuenta las perspectivas sociales, el consenso profesional, las leyes y regulaciones nacionales y estándares internacionales.
  • Abogar por la elaboración de leyes y regulaciones apropiadas para la edición del genoma de acuerdo con las normas y estándares internacionales y nacionales.
  • Abogar por el acceso igualitario de los pacientes a la tecnología, cuando la edición del genoma humano sea segura y efectiva.
  1. Los médicos deben:
  • Informarse sobre los aspectos técnicos, legales, éticos y sociales de la edición del genoma.
  • Familiarizarse con los marcos éticos internacionales y locales que regulan la edición del genoma.
  • Seguir todas las normas éticas de la investigación aprobadas en estas áreas, incluido el consentimiento informado apropiado.

 

Adoptada por la 71ª Asamblea General de la AMM (en línea), Córdoba, España, octubre 2020

 

INTRODUCCIÓN

La relación médico-paciente se engloba dentro de un modelo de relación humana que se remonta a los orígenes de la medicina. Representa un vínculo privilegiado entre un paciente y un médico, basado en la confianza. Es un espacio de creatividad donde se intercambia información, sentimientos, visiones, ayuda y apoyo.

La relación médico-paciente es una actividad moral que surge de la obligación del médico de aliviar el sufrimiento y respetar las creencias y la autonomía del paciente. Por lo general es iniciada por consentimiento mutuo, expresado o implicado, para prestar atención médica de calidad.

La relación médico-paciente es el núcleo fundamental del ejercicio de la medicina, tiene un alcance universal y busca la mejora de la salud y bienestar de la persona. Esto es posible gracias al intercambio de conocimientos, la toma de decisiones comunes, la autonomía del paciente, la autonomía del médico, la ayuda, la comodidad y el compañerismo en un ambiente de confianza. Esta es un componente inherente de la relación que puede ser terapéutica en sí misma.

La relación médico-paciente es fundamental para la atención centrada en el paciente. Requiere que tanto el médico como el paciente sean participantes activos en el proceso de curación. Si bien la relación fomenta y apoya la colaboración en la atención médica, los pacientes competentes toman las decisiones que dirigen su atención. La relación puede ser terminada por cualquiera de las partes. El médico debe ayudar al paciente a asegurar la transferencia de la atención y derivar al paciente a otro médico con la capacidad necesaria para continuar la atención.

La relación médico-paciente es un tema complejo sujeto a innumerables influencias culturales, tecnológicas, políticas, sociales, financieras o profesionales que ha evolucionado a lo largo de la historia, según la cultura y la civilización. Busca alcanzar lo que es más apropiado para los pacientes en base a evidencia científica, al mejorar su salud y bienestar mental y físico y aliviar el dolor. Esta relación experimentó un profundo cambio de la mano de hitos transcendentales como la Declaración Universal de Derechos Humanos (1948), la Declaración de Ginebra de la AMM (1948), Helsinki (1964) y Lisboa (1981). La relación ha avanzado lentamente hacia el empoderamiento del paciente.

En la actualidad, la relación médico-paciente está frecuentemente amenazada por influencias tanto dentro como fuera de los sistemas de salud. En algunos países y sistemas de salud, estas influencias corren el riesgo de alejar a los médicos de sus pacientes y pueden dañarlos. Entre los desafíos que es probable que socaven la eficacia terapéutica de la relación, notamos una creciente tendencia a:

  • La tecnologización de la medicina, que a veces lleva a una visión mecanicista de la atención médica, descuidando las consideraciones humanas.
  • El debilitamiento de las relaciones de confianza entre las personas en nuestras sociedades, lo que influye negativamente en las relaciones sanitarias;
  • Un enfoque principal en los aspectos económicos de la atención médica en perjuicio de otros factores que, a veces, plantean dificultades para establecer verdaderas relaciones de confianza entre el médico y el paciente.

Es de suma importancia que la relación médico-paciente integre estos factores de tal manera que la relación mejore y que su especificidad esté justificada. La relación nunca debe estar sujeta a interferencias administrativas, económicas o políticas.

RECOMENDACIONES

Reiterando su Declaración de Ginebra, el Código Internacional de Etica Médica y la Declaración de Lisboa sobre los Derechos del Paciente y dada la importancia esencial de la relación médico y paciente en la historia en el contexto presente y futuro de la medicina, la AMM y sus miembros constituyentes:

  1. Reafirman que la autonomía profesional y la independencia clínica son componentes esenciales de la atención médica de alta calidad y profesionalismo médico, que protegen el derecho de los pacientes a recibir la atención médica que necesitan.
  2. Instan a todos los agentes implicados en la relación médico-paciente, (gobiernos y autoridades de salud, asociaciones médicas, médicos y pacientes) a defender, proteger y fortalecer esta relación médico-paciente, en base a una atención de alta calidad, como un patrimonio científico, sanitario, cultural y social.
  3. Piden a los miembros constituyentes y a los médicos que defiendan este modelo de relación como núcleo fundamental de todo acto médico centrado en la persona, que defiendan la profesión médica y sus valores éticos, incluida la compasión, competencia, respeto mutuo y autonomía profesional y apoyar la atención centrada en el paciente.
  4. Reafirman su oposición a la interferencia gubernamental, de otros agentes y administraciones institucionales en la práctica de la medicina y en la relación médico-paciente.
  5. Reafirman su dedicación a proporcionar un servicio médico competente con total independencia profesional y moral, con compasión y respeto por la dignidad humana.
  6. Se comprometen a abordar los factores emergentes que podrían representar una amenaza para la relación médico-paciente y tomar medidas para mitigar esos factores.

Versión portuguesa

 

Adoptada por la 71ª Asamblea General de la AMM (en línea), Córdoba, España, octubre 2020

 

DEFINICIONES 

  • “Pseudociencia” (falsa ciencia) se denomina al conjunto de declaraciones, supuestos, métodos, creencias o prácticas que, sin seguir un método científico reconocido y validado, se presentan falsamente como científicas o basadas en evidencia.
  • “Pseudoterapias” (falsas terapias) son aquellas prácticas cuya pretendida finalidad es curar enfermedades, aliviar síntomas o mejorar la salud con procedimientos, técnicas, productos o sustancias basadas en criterios sin el respaldo de la evidencia científica disponible actualizada, y que pueden tener significantes riesgos y daños potenciales.

PREÁMBULO

El ejercicio médico precisa un fundamento en la mejor evidencia probada científicamente, disponible y actualizada. Las diferencias entre la medicina convencional y otras prácticas que no están sustentadas en la evidencia científica configuran el complejo universo de las pseudociencias y pseudoterapias.

Las pseudociencias y las pseudoterapias constituyen un sistema complejo de teorías, suposiciones, afirmaciones y métodos considerados erróneamente como científicos, pueden hacer que algunos pacientes perciban una relación de causa-efecto entre las pseudoterapias, su utilización y la percepción de mejora, por lo que pueden ser muy peligrosas y son poco éticas.

Existen terapias y técnicas aceptadas por la comunidad científica que, utilizadas con carácter complementario (como terapias nutricionales, de confort o bienestar, ambientales y de  relax, de apoyo o refuerzo psicoterápico, de afectividad y el uso de placebos), aportan beneficios a la terapia médica principal validada y efectiva.

La mayoría de los países no disponen de un marco regulatorio para estas pseudoterapias, lo que ha permitido su proliferación. En el pasado, la profesión médica las consideraba inofensivas debido a su supuesta falta de efectos secundarios, pero actualmente ya existen suficientes pruebas que sugieren que pueden suponer un peligro para la seguridad del paciente.

Las pseudociencias y las pseudoterapias pueden comportar importantes riesgos y daños potenciales por variadas razones:

  • Existe el riesgo de que los pacientes abandonen terapias médicas o medidas de prevención que se han demostrado efectivas por prácticas que no han demostrado valor curativo, y esto a veces puede ocasionar fracaso del tratamiento en enfermedades graves, que pueden provocar incluso la muerte.
  • La posibilidad más que frecuente de retrasos peligrosos y pérdida de oportunidad en la aplicación de fármacos, procedimientos y técnicas reconocidas y avaladas por la comunidad médica científica como intervenciones efectivas basadas en evidencia.
  • Pueden producir daños económicos a los pacientes, traumas físicos y psicológicos, e ir contra la dignidad de la persona, amenazando su integridad moral.
  • Las terapias no probadas pueden contribuir al encarecimiento de los procesos asistenciales.

Todos los nuevos métodos diagnósticos, preventivos o terapéuticos deben probarse de acuerdo con métodos científicos y principios éticos para determinar la seguridad, la eficacia, la efectividad y el ámbito de aplicación.

El médico tiene el deber de prestar a todos los pacientes una atención médica de calidad basada en la mejor evidencia científica disponible, como refiere la Declaración de Ginebra de la AMM y el Código Internacional de Ética Médica que recomiendan las más altas normas éticas y una atención de calidad para la seguridad del paciente. El interés del paciente debe anteponerse a cualquier otro interés, incluido el del propio médico.

La AMM se reafirma en su Declaración de Lisboa sobre Derechos de los Pacientes y recuerda que la Seguridad del Paciente requiere abordar todas las oportunidades para que el paciente reciba una atención adecuada basada en evidencia.

RECOMENDACIONES

 Por todo ello, la AMM hace las siguientes recomendaciones:

Autoridades Sanitarias Nacionales

  1. Es necesaria una regulación adecuada y rigurosa acorde con las mejores prácticas que aborde los riesgos y reduzca los daños potenciales que puedan ocasionar las pseudoterapias y las pseudociencias.
  2. Las autoridades nacionales y los sistemas sanitarios deben rechazar la aprobación y el reembolso de los gastos de proporcionar pseudoterapias.
  3. En colaboración con las corporaciones profesionales médicas, las sociedades científicas y las asociaciones de pacientes, las autoridades nacionales deben llevar a cabo una campaña de concienciación pública sobre el riesgo de las pseudoterapias y las pseudociencias.

Miembros constituyentes de la AMM y profesión médica

  1. Los miembros constituyentes de la AMM y la profesión médica deben reconocer y ser conscientes de los riesgos derivados de las pseudoterapias y las pseudociencias.
  2. Las pseudoterapias y pseudociencias no deben considerarse especialidades médicas reconocidas por la comunidad científica ni avaladas legalmente con un título de especialista o subespecialista en pseudociencias.
  3. Todos los actos de intrusismo profesional, las actividades de pseudoterapias y pseudociencias que pongan en riesgo la salud pública de la población deben denunciarse ante las autoridades competentes, incluida la publicidad engañosa y los sitios de salud en Internet no acreditados que oferten servicios o productos que pongan en riesgo la salud de los pacientes, además debe respetarse la confidencialidad del paciente. El papel de los medios de comunicación generales y especializados en pro de la transparencia y la veracidad a la hora de aumentar la conciencia científica pública crítica resulta fundamental.
  4. Los miembros constituyentes deben trabajar con los gobiernos para que establezcan la mayor protección posible de los pacientes tratados con pseudoterapias y pseudociencias. Cuando se descubra que estas prácticas son dañinas o se aplican de manera poco ética, debe existir un mecanismo que detenga inmediatamente o limite considerablemente cualquier tratamiento denominado complementario o alternativo para proteger la salud pública.

Médicos

  1. Con el apoyo de las organizaciones y autoridades que intervienen en la ordenación y regulación de la profesión médica, los médicos deben seguir ejerciendo la medicina como servicio basado en la aplicación del conocimiento científico crítico actual, en la destreza técnica y en el comportamiento ético, y mantener actualizadas sus habilidades con los avances en su ámbito profesional.
  2. El médico debe disponer de libertad de prescripción, respetando la evidencia científica y los estándares asistenciales, por calidad del acto médico y seguridad del paciente.
  3. El paciente ha de estar en todo momento debidamente informado sobre las opciones de terapia disponibles, su efectividad y riesgos, y poder participar a la hora de decidir cuáles son los mejores tratamientos. La buena comunicación, la confianza mutua y la atención médica centrada en la persona son ejes esenciales de la relación médico-paciente. Los pacientes y los médicos deberían y deben poder hablar sobre los riesgos de las pseudociencias y las pseudoterapias. La educación para la salud es un elemento fundamental.
  4. Los médicos deben ser formados para identificar las pseudociencias /pseudoterapias, las falacias lógicas y los sesgos cognitivos y aconsejar a sus pacientes en consecuencia. Deben ser conscientes de que algunos grupos de pacientes, como los pacientes con cáncer, enfermedades psiquiátricas o enfermedades crónicas graves y los niños, son particularmente vulnerables a los riesgos asociados al uso de pseudoterapias.
  5. Al recabar la historia clínica del paciente (anamnesis) el médico debe preguntar sobre todas las terapéuticas (probadas o no) a las que haya estado o sigua estando expuesto. Si fuera necesario, el médico debe informar al paciente sobre los daños asociados al uso previo de pseudoterapias y las pseudociencias.
  6. El médico debe informar al paciente que el tratamiento complementario no es una alternativa terapéutica ni sustituye a un tratamiento médico principal validado.

Nota: No es objeto de la presente declaración las medicinas ancestrales tradicionales ni las denominadas medicinas indígenas, firmemente arraigadas en pueblos y naciones, formando parte intrínseca de su cultura, ritos, tradiciones e historia.

 

Adoptada por la 70ª Asamblea General de la AMM, Tiflis, Georgia, Octubre 2019

  

La AMM reitera su fuerte compromiso con los principios de la ética médica y con que se debe mantener el máximo respeto por la vida humana. Por lo tanto, la AMM se opone firmemente a la eutanasia y al suicidio con ayuda médica.

Para fines de esta declaración, la eutanasia se define como el médico que administra deliberadamente una substancia letal o que realiza una intervención para causar la muerte de un paciente con capacidad de decisión por petición voluntaria de éste. El suicidio con ayuda médica se refiere a los casos en que, por petición voluntaria de un paciente con capacidad de decisión, el médico permite deliberadamente que un paciente ponga fin a su vida al prescribir o proporcionar substancias médicas cuya finalidad es causar la muerte.

Ningún médico debe ser obligado a participar en eutanasia o suicidio con ayuda médica, ni tampoco debe ser obligado a derivar un paciente con este objetivo.

Por separado, el médico que respeta el derecho básico del paciente a rechazar el tratamiento médico no actúa de manera contraria a la ética al renunciar o retener la atención no deseada, incluso si el respeto de dicho deseo resulta en la muerte del paciente.

 

 Adoptada por la 70ª Asamblea General de la AMM, Tiflis, Georgia, Octubre 2019

 

INTRODUCCION

Las enfermedades no transmisibles (ENTs) son las causas principales de muerte en el mundo. Cada año 40 millones de personas mueren por ENT[1]. Las causas más comunes de estas enfermedades son una dieta mal equilibrada e inactividad física. Un alto nivel de consumo de azúcares libres ha sido asociado con las ENTs por su relación con la obesidad y una mala calidad de alimentación.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de azúcares libres que el fabricante, el cocinero o el consumidor agrega a los alimentos y bebidas, tiene como resultado un aporte de energía excesivo que a su vez puede llevar a cambios paralelos en el peso corporal.

La OMS define los azúcares libres como “toda azúcar agregada durante la fabricación y preparación de alimentos y también el azúcar presente en la miel, jarabes, jugos de fruta y concentrados de fruta”.

El azúcar esta disponible de manera generalizada y su consumo mundial a aumentado en cerca de 130 a 178 millones de toneladas en la última década4.

El exceso del consumo de azúcares libres, en particular en forma de bebidas azucaradas, amenaza la calidad de los nutrientes de la dieta al contribuir a la densidad energética general, pero sin agregar nutrientes específicos. Esto puede producir un aumento de peso no saludable e incrementa el riesgo de enfermedad dental, obesidad y ENTs. Las bebidas azucaradas se definen como todo tipo de bebidas que contienen azúcares libres (monosacáridos y disacáridos), incluidas las gaseosas, jugos de frutas o verduras y concentrados líquidos y en polvo, agua con sabor, bebidas energéticas y para deportistas, té y café listos para consumo y leche con sabor.

La Organización Mundial de la Salud recomienda disminuir el consumo de azúcar a un nivel que incluya 5% del aporte energético total (que corresponde a cerca de 6 cucharaditas diarias) y no exceder 10% del aporte de energía total[2].

La elasticidad de los precios de las bebidas azucaradas, según un metaanálisis publicado en EE.UU. es de -1,21, lo que significa que para cada 10% de aumento de precio de las bebidas azucaradas hay una disminución de 12.1% en el consumo. Un ejemplo de elasticidad de los precios que ha tenido buenos resultados es el de México, donde el consumo de bebidas azucaradas disminuyó después de aplicar un impuesto al azúcar.

Los datos y la experiencia de todo el mundo demuestran que un impuesto sobre el azúcar funciona mejor como parte de un conjunto integral de intervenciones para tratar la obesidad y las enfermedades crónicas relacionadas. Tales intervenciones incluyen regulaciones de publicidad de alimentos, etiquetado de alimentos, campañas educativas y subsidios para alimentos saludables.

RECOMENDACIONES

1. La Asociación Médica Mundial (AMM) y sus miembros constituyentes:

  • Piden a los gobiernos nacionales disminuir la asequibilidad de bebidas sin azúcar y azucaradas por medio de un impuesto al azúcar. Los ingresos fiscales recaudados deben utilizarse para la promoción de la salud y los programas preventivos de salud pública destinados a reducir la obesidad y las ENTs en sus países.
  • Instan a los fabricantes de alimentos a avisar claramente en las etiquetas si sus productos contienen azúcar e instan a los gobiernos a que dichas etiquetas sean obligatorias.
  • Instan a los gobiernos a regular estrictamente la publicidad de los alimentos y bebidas que contienen azúcar dirigidos especialmente a los niños.
  • Instan a los gobiernos nacionales a restringir las bebidas y productos azucaradas que tienen un alto concentrado de azúcares libres, en las instituciones educacionales y de salud y reemplazarlas por alternativas más saludables.

2. Los miembros constituyentes de la AMM y sus médicos miembros deben trabajar con las partes interesadas en el país para:

  • Abogar por alimentos sostenibles sanos con un contenido de azúcares libres bajo 5% de todo el consumo de energía.
  • Promocionar programas educativos de nutrición sobre cómo preparar comidas sanas con alimentos sin azúcar agregada.
  • Iniciar o apoyar campañas sobre hábitos alimenticios saludables para disminuir el consumo de azúcar.
  • Abogar por un enfoque intersectorial, multidisciplinario e integral para reducir el consumo de azúcares libres.

 

[1] WHO Key Fact Sheet, June 2017

[2] WHO Guideline: Sugars Intake for Adults and Children 2015

Adoptada por la 70ª Asamblea General de la AMM, Tiflis, Georgia, Octubre 2019
Derogada y archivada por la 76.ª Asamblea General de la AMM, Oporto, Portugal, octubre de 2025

INTRODUCCION 

La inteligencia artificial (IA) es la capacidad que tiene una máquina para simular un comportamiento inteligente, calidad que permite que una entidad funcione apropiadamente y con anticipación en consideración de su entorno. El término AI cubre una gama de métodos, técnicas y sistemas. Los ejemplos comunes de sistemas de IA incluyen, entre otros, el procesamiento de lenguaje natural (PNL), la visión artificial y el aprendizaje automático. En la atención médica, como en otros sectores, las soluciones de IA pueden incluir una combinación de estos sistemas y métodos.

(Nota: un glosario de términos aparece como un apéndice a esta declaración).

En salud, el término más apropiado es “inteligencia aumentada”, concepto alternativo que refleja con mayor precisión el propósito de tales sistemas porque están destinados a coexistir con la toma de decisiones humana [1]. En consecuencia, lo que continúa en esta declaración IA se refiere a inteligencia aumentada.

Un sistema de IA que utiliza el aprendizaje automático emplea un algoritmo programado para aprender («algoritmo de aprendizaje») a partir de los datos denominados «datos de capacitación». El algoritmo de aprendizaje luego ajustará automáticamente el modelo de aprendizaje automático basado en los datos de capacitación. Un «sistema de aprendizaje continuo» actualiza el modelo sin supervisión humana a medida que se presentan nuevos datos, mientras que los «aprendices bloqueados» no actualizarán automáticamente el modelo con datos nuevos. En la atención médica, es importante saber si el algoritmo de aprendizaje está finalmente bloqueado o si continúa aprendiendo una vez implementado en la práctica clínica para evaluar la calidad, la seguridad y el sesgo de los sistemas. Es fundamental ser capaz de rastrear la fuente de los datos de capacitación para comprender el riesgo asociado con la aplicación de un sistema de IA de atención médica a personas cuyas características personales son significativamente diferentes a las del conjunto de datos de capacitación.

La IA de atención médica generalmente describe métodos, herramientas y soluciones cuyas aplicaciones se centran en entornos de atención médica y atención al paciente. Además de las aplicaciones clínicas, existen muchas otras aplicaciones de los sistemas de IA en la atención médica, incluidas las operaciones comerciales, la investigación, la administración de la atención médica y la salud de la población.

Los conceptos de inteligencia artificial y aprendizaje automático han interesado rápidamente a las organizaciones de salud, pero a menudo no existe una definición clara de la terminología utilizada. Muchos consideran la IA como una panacea tecnológica, sin embargo, la realización de sus promesas puede presentar desafíos, debido a la supervisión regulatoria en desarrollo para garantizar la seguridad y la eficacia clínica, la falta de estándares ampliamente aceptados, los problemas de responsabilidad, la necesidad de leyes y regulaciones claras que rijan el uso de datos y la falta de comprensión compartida de la terminología y las definiciones.

Algunos de los usos más prometedores de los sistemas de inteligencia artificial para la salud incluyen un análisis predictivo, medicina de precisión, diagnóstico por imágenes de enfermedades y apoyo a las decisiones clínicas. Los avances en estas áreas están en marcha y la inversión en IA ha aumentado en los últimos años [2]. En la actualidad, los sistemas de IA para la salud comienzan a proporcionar valor en el reconocimiento de patrones, procesamiento de lenguaje natural y aprendizaje en profundidad. Los sistemas de aprendizaje automático están diseñados para identificar errores de datos sin perpetuarlos. Sin embargo, los sistemas de IA para la salud no reemplazan la necesidad de la relación médico-paciente. Tales sistemas aumentan la atención médica proporcionada por el médico y no la reemplazan.

Los sistemas de IA para la salud deben ser transparentes, reproducibles y generar confianza entre el personal de salud y los pacientes. Los sistemas se deben enfocar en las necesidades de los usuarios. La facilidad de empleo y su eficacia deben ser evaluados por participantes que reflejan necesidades similares y patrones de práctica de los usuarios finales y los sistemas deben funcionar de manera eficaz con las personas. Los médicos estarán más dispuestos a aceptar sistemas de IA si pueden ser integrados o mejorar sus esquemas de prácticas y también mejorar la atención de los pacientes.

Oportunidades

La IA para la salud puede ofrecer un conjunto de herramientas de transformación a los médicos y los pacientes y tiene el potencial de que la atención médica sea más segura y más eficaz. La automatización de los procesos hospitalarios y administrativos podría mejorar la productividad de los médicos. El uso de la extracción de datos para producir información útil y exacta en el momento adecuado puede mejorar los registros de salud electrónicos y el acceso a la información pertinente del paciente. Los resultados de la extracción de datos también puede entregar evidencia para las tendencias que pueden servir para informar sobre la asignación de recursos y las decisiones de utilización. Puede haber mejores diagnósticos y tratamientos si se analiza toda la información conocida de un paciente. También existe el potencial de mejorar la experiencia del paciente, la seguridad del paciente y el cumplimiento del tratamiento.

Las aplicaciones de la IA para la salud en la educación médica incluyen la educación médica continua, simulaciones de capacitación, asistencia al aprendizaje el acompañamiento de los estudiantes de medicina y residentes y puede proporcionar herramientas de evaluación objetiva de las competencias. Estas aplicaciones ayudarían a personalizar la educación médica y facilitar el aprendizaje independiente individual o grupal.

A parte de los médicos, hay varios interesados y responsables de políticas que participan en la evolución de la IA en la atención médica. Esto incluye a las asociaciones médicas, empresas, gobiernos y la industria tecnológica. Los médicos tienen una oportunidad sin precedentes de informar e influir de manera positiva en los debates que se dan actualmente sobre la IA. Los médicos deben involucrarse de forma dinámica en estos intercambios para asegurar que sus opiniones sean escuchadas e incorporadas a esta tecnología de rápido desarrollo.

Desafíos

Los desarrolladores y reguladores de los sistemas de inteligencia artificial para la salud deben garantizar la divulgación adecuada y tener en cuenta los beneficios, las limitaciones y el alcance del uso apropiado de dichos sistemas. A su vez, los médicos tendrán que comprender los métodos y sistemas para basarse en la recomendación clínica. Los estudiantes de medicina y los médicos en ejercicio deben ser informados sobre las posibilidades y limitaciones de los sistemas de IA para la salud, ya que su participación es esencial para la buena evolución del sector. Los sistemas de IA siempre deben ser conformes a los valores profesionales y a la ética de la profesión médica.

La protección de la confidencialidad, control y propiedad de los datos del paciente es fundamental en la relación médico-paciente. El anonimato de los datos no proporciona una protección suficiente a la información del paciente cuando es suficiente tres puntos de información, que pueden poner en riesgo la privacidad de los datos del paciente, a los algoritmos de aprendizaje por las máquinas para identificar a una persona en un inmenso y complejo conjunto de información. Las expectativas actuales de los pacientes en cuanto a la confidencialidad de su información personal deben abordarse y desarrollar nuevos modelos que incluyan el consentimiento y la gestión de datos. Se exploran soluciones técnicas viables para mitigar estos riesgos, que serán importantísimas para adoptar el uso de sistemas de IA para la salud.

La estructura y la integridad de la información son los mayores desafíos que deben enfrentarse cuando se diseñen los sistemas de IA para la salud. El conjunto de información en el que los sistemas de aprendizaje automático se basan es creado por humanos y puede ser sesgado y tener errores. Es por eso que estos conjuntos de información normalizarán errores y las predisposiciones inherentes a su constitución. Las minorías se pueden encontrar en desventaja porque hay menos información disponible sobre las poblaciones minoritarias. Otra consideración en el diseño es cómo se evaluará un modelo en su exactitud, lo que incluye un análisis muy cuidadoso de la información y su relación con el conjunto de datos usados para evaluar los algoritmos.

La generalización de los sistemas de IA presenta importantes desafíos sobre cuestiones de responsabilidad. A medida que los modelos de supervisión nuevos y existentes desarrollan sistemas de IA para la salud, los desarrolladores de tales sistemas generalmente tendrán el mayor conocimiento de los riesgos y estarán mejor posicionados para mitigar el riesgo. Como resultado, los desarrolladores de sistemas de IA para la salud y aquellos que exigen el uso de dichos sistemas deben ser responsables de los eventos adversos que resulten de un mal funcionamiento o una imprecisión en la producción. Los médicos a menudo se ven frustrados con el uso de registros de salud electrónicos. Los sistemas diseñados para respaldar la atención médica prestada en equipo y los modelos sobre el flujo de tareas. Además de los factores humanos en el diseño y desarrollo de los sistemas de IA para la salud, se debe dar una consideración significativa al despliegue apropiado del sistema. No todos los sistemas se pueden implementar en todas las configuraciones, debido a las variaciones de la fuente de datos.

Ya se trabaja para avanzar en la prestación y la supervisión de la atención médica con utilización de IA, incluidas las normas de atención, los derechos de propiedad intelectual, los procedimientos de certificación o las regulaciones gubernamentales y los aspectos éticos y jurídicos.

 

RECOMENDACIONES

1. Que la AMM:

  • Reconozca el potencial para mejorar los resultados de los pacientes y la satisfacción profesional de los médicos mediante el uso de IA para la salud, siempre que se ajusten a los principios de la ética médica, la confidencialidad de los datos de los pacientes y la no discriminación.
  • Apoye el proceso de establecer prioridades para la IA para la salud.
  • Inste a la revisión del currículo médico y a tener oportunidades educacionales para los pacientes, médicos, estudiantes de medicina, administradores de salud y otros profesionales de salud, a fin de promover una mayor comprensión de los diversos aspectos, positivos y negativos, de la IA para la salud.

2. La AMM insta a sus organizaciones miembros a:

  • Encontrar oportunidades para incluir la perspectiva del médico en ejercicio en el desarrollo, diseño, validación e implementación de la IA para la salud.
  • Abogar por la participación directa del médico en el desarrollo y gestión de la IA para la salud y por una supervisión apropiada gubernamental y profesional de los productos y servicios de la IA para que sean seguros, eficaces, equitativos, éticos y accesibles.
  • Abogar por que todos los sistemas de IA para la salud sean transparentes, reproducibles y sean confiables por el personal de salud y los pacientes.
  • Abogar por la primacía de la relación médico-paciente cuando se desarrollan e implementan sistemas de AI para la salud.

APENDICE

GLOSARIO DE TERMINOS UTILIZADOS EN LA INTELIGENCIA AUMENTADA PARA LA SALUD

El algoritmo es un conjunto de instrucciones detalladas y ordenadas que son seguidas por un computador para resolver un problema matemático o para completar un proceso informático.

La inteligencia artificial consiste en una serie de métodos computacionales utilizados para producir sistemas que realizan tareas que muestran un comportamiento inteligente que no se puede distinguir del comportamiento humano.

La inteligencia aumentada (IA) es una conceptualización de la inteligencia artificial que se centra en el papel de asistencia de la inteligencia artificial, y enfatiza que su diseño mejora la inteligencia humana en lugar de reemplazarla.

La visión computacional es un campo científico interdisciplinario que trata sobre cómo se puede hacer que los computadores obtengan un alto nivel de comprensión a partir de imágenes digitales o videos y busque automatizar las tareas que puede realizar el sistema visual humano.

La extracción de datos es un subcampo interdisciplinario de informática y estadística cuyo objetivo general es extraer información (con métodos inteligentes) de un conjunto de datos y transformar la información en una estructura comprensible para su uso posterior

El aprendizaje automático (AA) es el estudio científico de algoritmos y modelos estadísticos que utilizan los sistemas informáticos para realizar con eficacia tareas específicas con una mínima interacción humana y sin usar instrucciones explícitas, mediante el aprendizaje de datos e identificación de patrones.

El procesamiento del lenguaje natural (PLN) es un subcampo de ciencias de la computación, ingeniería de la información e inteligencia artificial relacionada con las interacciones entre las computadoras y los lenguajes humanos (naturales), en particular, cómo programar los computadores para procesar y analizar grandes cantidades de datos en lenguaje natural.

Los datos de capacitación se utilizan para formar un algoritmo; generalmente consiste en un cierto porcentaje de un conjunto de datos general junto con un conjunto de pruebas. Como regla general, cuanto mejor sean los datos de capacitación, mejor será el rendimiento del algoritmo. Una vez que un algoritmo es formado en un conjunto de capacitación, generalmente se evalúa en un conjunto de prueba. El conjunto de capacitación debe estar etiquetado o enriquecido para aumentar la confianza y precisión de un algoritmo.

[1] Para fines de esta Declaración, el término «IA de atención médica» se refiere a los sistemas que enriquecen el trabajo de los médicos, pero no lo reemplazan.

[2] CB Insights. The Race for AI: Google, Baidu, Intel, Apple in a Rush to Grab Artificial Intelligence Startups. https://www.cbinsights.com/research/top-acquirers-ai-startups-ma-timeline/.

Adoptada en la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

INTRODUCCIÓN

1. La AMM señala la tendencia creciente en todo el mundo para que las mujeres ingresen a las facultades de medicina y la profesión médica, y considera que el estudio y la práctica de la medicina deben transformarse en mayor o menor medida para ayudar a todas las personas que estudian a convertirse o ejercer como médicos, de cualquier género. Este es un proceso esencial de modernización mediante el cual se promueve la inclusión mediante la igualdad de género. Esta declaración propone mecanismos para identificar y abordar las barreras que causan discriminación entre los géneros.

2. En muchos países del mundo la cantidad de mujeres que estudian y ejercen la medicina ha aumentado en las últimas décadas, más de 50% en muchos lugares.

3. Esto ofrece oportunidades para adoptar medidas, incluido lo siguiente:

  • Mayor énfasis en un equilibrio apropiado entre trabajo y vida de familia, y apoyar el desarrollo profesional del médico.
  • Estímulo y realización de las mujeres en puestos a nivel académico, directivo y de gestión.
  • Igualdad de salarios y oportunidades de empleo para hombres y mujeres, terminar con las diferencias de salarios por género en medicina, y eliminación de barreras que afectan negativamente el avance de las doctoras.

4. El tema de la mujer en la medicina fue reconocido previamente en la Resolución de la AMM sobre el Acceso de las mujeres y los niños a la atención médica y el papel de la mujer en la profesión médica que, entre otras cosas, exigía una mayor representación y participación en la profesión médica, especialmente ante la creciente matriculación de mujeres en las escuelas de medicina. También exigía una mayor tasa de crecimiento de la afiliación de mujeres en las asociaciones médicas nacionales (AMNs) a través del empoderamiento, el desarrollo profesional, la capacitación y otras iniciativas estratégicas.

RECOMENDACIONES

Mayor presencia de mujeres en el mundo académico, directivo y funciones de gestión

5.  Se insta a las asociaciones médicas nacionales/escuelas de medicina/empleadores a facilitar la creación de programas de mentores, patrocinios y contratación activa para proporcionar a los estudiantes de medicina y médicos, guía y estímulo necesarios para asumir funciones de liderazgo y gestión.

6. Las AMNs deben considerar oportunidades e incentivos para estimular a los hombres y las mujeres a seguir diversas carreras en medicina y postular a becas y a cargos académicos, de alta dirección y gestión.

7. Las AMNs deben presionar para lograr políticas sobre educación médica y trabajo igual para los géneros.

8. Las AMNs deben fomentar la participación de hombres y mujeres en organizaciones sobre políticas de salud y organizaciones médicas profesionales.

Equilibrio entre trabajo y vida personal

9. Los médicos deben reconocer que un equilibrio entre trabajo y vida personal es beneficioso para todos los médicos, pero que las mujeres pueden enfrentar desafíos especialmente en el equilibrio entre trabajo y vida personal impuestos por las expectativas de la sociedad sobre los roles de género que deben abordarse para solucionar el problema. Los empleadores en salud pueden mostrar liderazgo y ayudar a enfrentar este desequilibrio al:

  • Asegurar que las mujeres que toman una licencia de maternidad puedan tener acceso a todos sus derechos.
  • Introducir programas que insten a los hombres y también a las mujeres a tomar una licencia parental, de modo que las mujeres puedan continuar sus carreras y los hombres puedan pasar un tiempo importante con sus familias.

10. Los hospitales y otros lugares de trabajo deben esforzarse para ofrecer y promover el acceso a guarderías de alta calidad, asequibles y flexibles para los padres que trabajan, incluido el alojamiento y guardería cuando sea apropiado. Estos servicios deben estar disponible a médicos de ambos sexos, reconociendo la necesidad de un mejor equilibrio entre trabajo y vida personal. Los empleadores deben entregar información sobre los servicios disponibles que apoyan la compatibilidad de trabajo y familia.

11. Los hospitales y otros lugares de trabajo deben ser receptivos a la posibilidad de horarios de trabajo flexible y favorable a las familias, incluidas las residencias parciales, puestos y nombramientos profesionales.

12. Es necesario investigar más los horarios de trabajo alternativos y las oportunidades de telecomunicación que permita la flexibilidad en el equilibrio de exigencias entre trabajo y vida personal.

13. Las AMNs deben abogar por el cumplimiento, y cuando sea necesario, de políticas que obliguen al pago apropiado de permiso parental y sus derechos en sus respectivos países.

14. Los centros médicos y las organizaciones profesionales deben contar con políticas y prácticas justas, imparciales y transparentes para ofrecer a todos los médicos y estudiantes de medicina un acceso igualitario a oportunidades de empleo, educación y formación en medicina.

Embarazo y paternidad

15. Debe ser ilegal que los empleadores pregunten a los postulantes sobre embarazos o planificación familiar en relación con el trabajo.

16. El empleador debe realizar una evaluación del riesgo para las doctoras embarazadas y sus niños por nacer, cuando una doctora ha dado a luz recientemente y amamanta. Cuando se constata o el médico considera que una empleada o su niño correrían riesgo si sigue con sus tareas habituales, el empleador debe ofrecer un trabajo alternativo adecuado por el cual la doctora debe recibir su salario normal. La doctora debe tener derecho a no trabajar turnos de noche o turnos de guardia durante la última parte del embarazo, sin sufrir consecuencias negativas sobre el salario, empleo o la progresión en la residencia.

17. Las doctoras embarazadas deben tener las mismas oportunidades de formación en el perfeccionamiento de postgrado.

18. Los padres deben tener el derecho a permisos parentales sin consecuencias negativas para su empleo y oportunidades de formación o de carrera.

19. Los padres deben tener derecho a volver al mismo puesto después de la licencia parental, sin temor a despido.

20. Los empleadores y los organismos de formación deben proporcionar el apoyo necesario a cualquier médico que vuelva luego de un prolongado período de ausencia, incluido por licencia de maternidad y permiso por cuidado de ancianos.

21. Las madres deben poder amamantar (o tener tiempo protegido para extraerse la leche) durante las horas de trabajo, según las normas actuales de la OMS.

22. Los lugares de trabajo deben contar con instalaciones adecuadas para las mujeres que amamantan, incluidas zonas designadas para amamantar, extraerse la leche y almacenarla, que sean tranquilos, higiénicos y privados.

Cambios en la cultura de organización

23. La profesión médica y los empleadores deben trabajar para eliminar la discriminación y el acoso en base al género y crear un marco de apoyo que permita oportunidades iguales de empleo, formación y avance.

24. La amistad familiar debe ser parte de la cultura organizacional de los hospitales y otros lugares de trabajo.

Planificación e investigación de la fuerza laboral

25. Las AMNs deben instar a los gobiernos a considerar la creciente cantidad de mujeres que entran a medicina en un contexto de planificación de la fuerza laboral a largo plazo. Una fuerza laboral diversa es beneficiosa para el sistema de salud y los pacientes. Las organizaciones que ofrecen atención médica deben asegurar que los sistemas tengan los recursos apropiados para que todos los que trabajan en ellos puedan prestar una atención segura a los pacientes y sean recompensados adecuada y equitativamente. Los gobiernos también deben trabajar para impedir actitudes y comportamientos negativas, prejuicios o normas y valores caducos de parte de las organizaciones y las personas.

26. Las AMNs deben instar a los gobiernos a invertir en investigación para identificar los factores que llevan a las mujeres y los hombres a optar por ciertos campos de especialización a comienzos de su educación médica y formación y luchar por eliminar los obstáculos a fin de lograr una representación igualitaria de hombres y mujeres en todos los campos de la medicina.

27. Las AMNs deben instar a los gobiernos y los empleadores a asegurar que los hombres y las mujeres reciban una compensación igual proporcional a sus trabajos y luchar para eliminar la diferencia de salarios entre sexos en medicina.

Adoptada en la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

INTRODUCCION

  1. La expiración de las patentes para productos bioterapéuticos originales ha llevado a la creación y aprobación de copias, llamadas “medicamentos biológicos similares” o “biosimilares” que son muy similares a un medicamento biológico aprobado previamente, conocido como medicamento de referencia o de origen.
  2. En vista de que los biosimilares son producidos en organismos vivos, pueden existir algunas diferencias menores con respecto al medicamento de referencia, ya que la variabilidad menor es una característica de todos los medicamentos biológicos. La fabricación de los biosimilares por lo general es más compleja que elaboración de las moléculas químicas. Por esto, la substancia activa en el biosimilar final puede tener un grado inherente de menor variabilidad. Los innovadores bilógicos también  tienen una variabilidad inherente entre lotes y por esta razón los biosimilares no siempre son intercambiables con los productos de referencia, incluso después de la aprobación reguladora.
  3. Los biosimilares no son lo mismo que los genéricos. El medicamento genérico es una copia idéntica de un producto farmacéutico con licencia en la actualidad que tiene una protección de patente expirada y debe contener los “mismos ingredientes activos que la fórmula original”. El biosimilar es un producto diferente con una estructura similar, pero no idéntica, que provoca una respuesta clínica similar. En consecuencia, los medicamentos biosimilares pueden causar una respuesta inmune no deseada. Aunque los genéricos son intercambiables, los biosimilares no siempre lo son.
  4. Los productos biosimilares han estado disponibles en Europa por casi una década después de ser aprobados por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) en 2005. El primer biosimilar fue aprobado por la Administración de Alimentos y Drogas (FDA) para su uso en EE.UU. durante 2015.
  5. Los medicamentos biosimilares han transformado las perspectivas para los pacientes con enfermedades crónicas o debilitantes, ya que es posible obtener una eficacia similar a la del producto de referencia con un costo más bajo.
  6. Los biosimilares también aumentarán el acceso para los pacientes que no pueden obtener el medicamento original. Un mayor acceso generalizado a los biofármacos eficaces puede disminuir la discapacidad, morbilidad y mortalidad asociada a diversas enfermedades crónicas.
  7. Sin embargo, el bajo costo potencial de los biosimilares aumenta el riesgo de que las compañías aseguradoras y  los profesionales de la salud prefieran  los medicamentos originales, incluso cuando puede que no sean apropiados para un paciente o en situaciones en las que no demuestren una equivalencia clínica adecuada a un producto biológico original. La decisión de  prescribir biosimilares o cambiar a los pacientes de medicamentos de referencia a los biosimilares la deben tomar los médicos tratantes, no las compañías de seguros de salud. 

RECOMENDACIONES

  1. Las asociaciones médicas nacionales deben trabajar con sus gobiernos para elaborar una guía nacional sobre la seguridad de los productos biosimilares.
  2. Las asociaciones médicas nacionales deben abogar por ofrecer terapias biosimilares tan seguras y eficaces como las de los productos de referencia.
  3. Las asociaciones médicas nacionales deben luchar para asegurar que el médico mantenga su autonomía para dispensar un producto biológico.
  4. Cuando sea apropiado, las asociaciones médicas nacionales deben ejercer presión para impedir que las compañías aseguradoras y los fondos de salud requieran la intercambiabilidad  y para regulaciones de seguridad del intercambio de los medicamentos biosimilares cuando esté permitido.
  5. Los médicos deben asegurarse que el historial médico del paciente incluya con exactitud el medicamento biosimilar que se prescribe y usa.
  6. Los médicos no deben prescribir un medicamento biosimilar a los pacientes que ya utilizan satisfactoriamente un fármaco de origen, al menos que se haya demostrado y establecido claramente la equivalencia clínica y que se haya informado de manera adecuada a los pacientes y que éstos hayan otorgado su consentimiento. No debe haber una sustitución entre los biosimilares y otros medicamentos sin considerar la autorización del médico.
  7. Los médicos deben tratar de mejorar su comprensión sobre las distinciones entre productos biosimilares muy similares al producto de origen o intercambiable con él, informar sobre los medicamentos biosimilares y su intercambiabilidad  y promover un etiquetado claro de éstos.
  8. Los médicos deben mantenerse alerta e informar al fabricante, al igual que a través de las vías reguladoras designadas, todo evento adverso que sufran los pacientes que utilizan medicamentos biológicos originales o biosimilares.

Adoptada por la 49ª Asamblea General de la AMM Hamburgo, Alemania, noviembre 1997,
reafirmada por la 176a sesión del Consejo de la AMM, Berlín, Alemania, mayo 2007
y enmendada por la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

 

Objetivo y Definiciones

El objetivo de esta Declaración incluye los siguientes delitos específicos: genocidio, crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, definidos en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.

Introducción

  • Los médicos están regidos por la ética médica para trabajar por el bien de sus pacientes. Los médicos que han sido condenados por genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad han violado la ética médica, los derechos humanos y la legislación internacional, por lo que están inhabilitados para ejercer la medicina.
  • Conforme al principio de presunción de inocencia, sólo los médicos que han sido condenados por delitos específicos deben estar inhabilitados para ejercer la medicina. 

Discusión

  1. Los médicos que pretenden trabajar en cualquier país están sujetos a los reglamentos de las autoridades o jurisdicción pertinente de dicho país. La persona que desea una licencia para ejercer la profesión tiene el deber de demostrar que está habilitada para hacerlo.
  2. A los médicos que han sido condenados por genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad no se les debe permitir ejercer en otro país o jurisdicción.
  3. Las autoridades pertinentes que otorgan licencias deben asegurarse de que los médicos tengan las cualificaciones requeridas y que no hayan sido condenados genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad.
  4. Los médicos que han sido condenados por delitos específicos, a veces han podido escapar del país donde se cometieron dichos crímenes y han obtenido una licencia para ejercer la medicina de parte de las autoridades pertinentes que otorgan licencias en otro país.
  5. Esto va claramente contra el interés público y daña la reputación de la profesión médica y puede ser perjudicial para la seguridad del paciente.

Recomendaciones

  1. La AMM recomienda que a los médicos que han sido condenados por delitos específicos no se les otorgue una licencia para ejercer la medicina y no se les permita ser miembros de asociaciones médicas nacionales, por parte de las autoridades reguladoras y de licencias pertinentes de esa jurisdicción.
  2. La AMM recomienda que las autoridades reguladoras y de licencias pertinentes hagan uso de su autoridad para informarse, en lo posible, si he han presentado denuncias verdaderas de participación de médicos en genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad y al mismo tiempo respetar la presunción de inocencia.
  3. Las asociaciones médicas nacionales deben asegurarse de que las autoridades apropiadas realicen una completa investigación de dichas denuncias.
  4. La AMM recomienda que las asociaciones médicas nacionales aseguren que exista una comunicación eficaz entre ellas y que cuando sea posible y apropiado informen a las autoridades reguladoras pertinentes que otorgan licencias sobre las condenas de los médicos por genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad.

Adoptada por la 24ª Asamblea Médica Mundial, Oslo, Noruega, agosto 1970,
y enmendada por la 35ª Asamblea Médica Mundial, Venecia, Italia, octubre 1983,
la 57
ª Asamblea General de la AMM, Pilanesberg, Sudáfrica, octubre 2006,
la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

 

INTRODUCCION

  1. El término del embarazo por indicación médica se refiere sólo a la interrupción del embarazo por razones de salud, conforme a los principios de la medicina basada en la evidencia y a la buena práctica médica. Esta Declaración no incluye ni implica ninguna opinión sobre el término del embarazo llevado a cabo por otro motivo que no sea una indicación médica.
  2. El término del embarazo es un asunto médico entre el paciente y el médico. Las actitudes frente al término del embarazo son una cuestión de convicción y conciencia individuales que deben ser respetadas.
  3. Las circunstancias en que una paciente puede sufrir daños si sigue con el embarazo hasta el final presenta un conflicto entre la vida del feto y la salud de la embarazada. La diversidad de respuestas para resolver este dilema refleja la variedad de estándares culturales, legales, tradicionales y regionales de la atención médica en el mundo.

RECOMENDACIONES

  1. Los médicos deben conocer la legislación local sobre el término del embarazo, reglamentos y requisitos de información. Las leyes nacionales, normas, estándares y práctica clínica relativas al término del embarazo deben promover y proteger la salud, dignidad de la mujer y sus derechos humanos, consentimiento informado voluntario y autonomía para decidir, confidencialidad y privacidad. Las asociaciones médicas nacionales deben abogar para que la política de salud nacional defienda estos principios.
  2. Cuando la ley permita el término del embarazo por indicación médica, el procedimiento debe ser realizado por un médico competente y sólo en casos extremos por otro personal de salud cualificado, conforme a los principios de la medicina basada en la evidencia y de la buena práctica médica, en un establecimiento aprobado que cumpla con las normas médicas necesarias.
  3. Las convicciones del médico y del paciente deben ser respetadas.
  4. Los pacientes deben ser apoyados apropiadamente y recibir tratamiento médico y psicológico necesario, además de un asesoramiento adecuado, si lo desean.
  5. El médico tiene derecho a la objeción de conciencia para realizar un aborto, por lo que se puede retirar si asegura que un colega cualificado siga con la atención médica. En todo caso, el médico debe realizar los procedimientos necesarios para salvar la vida de la mujer y evitar graves lesiones a su salud.
  6. Los médicos deben trabajar con las instituciones y autoridades pertinentes para asegurar que ninguna mujer sufra lesiones porque no se dispone de servicios de término del embarazo por indicación médica.

 

Adoptada en la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

Introducción

  1. La AMM considera que la salud y el bienestar dependen de los determinantes sociales de la salud (SDH), las condiciones en que las personas nacen, crecen, viven, trabajan y envejecen. Estos determinantes sociales influirán directamente en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG) de la ONU. Muchos de los objetivos SDG, metas e indicadores que se han elaborado para medir su progreso también serán medidas útiles del impacto que las acciones tienen en el mejoramiento de los SDH y en particular en la disminución de las desigualdades en salud.
  2. Esta declaración se basa en la política de la AMM sobre los Determinantes Sociales de la Salud como está establecida en la Declaración de Oslo y en los principios básicos de la ética médica de la Declaración de Ginebra.
  3. La AMM reconoce los importantes esfuerzos realizados por la ONU con la adopción el 25 de septiembre de 2015 de la resolución “Transforming our world: the 2030 Agenda for Sustainable Developmet”. La agenda sobre desarrollo sostenible se basa en cinco temas clave: gente, planeta, prosperidad, paz y asociación y el principio de no dejar a nadie atrás. La AMM afirma la importancia de los esfuerzos globales en el desarrollo sostenible y el impacto que pueden tener en la humanidad.
  4. Los SDG están basados en las lecciones aprendidas de los éxitos y fracasos para lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio (MDG), incluida la desigualdad en muchos ámbitos de la vida. Aunque no hay un concepto general que unifique a los SDG, la AMM considera que la desigualdad en salud y bienestar resume gran parte de la agenda 2030. La AMM nota que sólo el objetivo SD3 es claramente sobre salud, muchos de los objetivos tienen elementos importantes de salud.
  5. La AMM reconoce que todos los gobiernos deben comprometerse e invertir para implementar completamente los objetivos en 2030, de conformidad con la agenda de acción Addis Ababa. La AMM también reconoce el riesgo que los SDG puedan ser consideradas inasequibles debido a su costo potencial estimado entre 3,3 y 4,5 trillones de dólares al año.
  6. La AMM enfatiza la necesidad de trabajo cruzado e intersectorial para lograr los objetivos y considera que la salud debe estar incluida en todos los SDG y no sólo en el objetivo específico SD3 de salud.

Prioridades de políticas

  1. Reconocimiento de la salud en todas las políticas y los determinantes sociales de la salud/ enfoque de toda la sociedad.
  2. Ambitos de políticas que son esenciales para lograr el SDG3, incluyen:
  • Empoderamiento del paciente y seguridad del paciente
  • Mejoramiento continuo de la calidad en salud
  • Superar el impacto del envejecimiento en salud
  • Abordar la resistencia antimicrobiana
  • Seguridad y bienestar del personal de salud
  1. Asegurar un alineamiento de políticas entre todos los organismos de la ONU y el trabajo de las organizaciones gubernamentales regionales, como la UE, Unión Africana, Liga Arabe, ASEAN y OEA.
  2. La AMM se compromete a respaldar la implementación de los otros tres acuerdos globales sobre el proceso de desarrollo sostenible:
  • La Agenda de acción Addis Ababa como el mecanismo que proporcionará el apoyo final para la agenda 2030.
  • El Acuerdo de París es el mecanismo obligatorio del proceso de desarrollo sostenible que establece un plan de acción para poner al mundo por buen camino para evitar el peligroso cambio climático, al limitar el calentamiento global a bajo 2ºC por sobre los niveles pre industriales.
  • El Marco Sendai para la Disminución de Riesgo de Catástrofe como el acuerdo que reconoce que el Estado tiene el rol principal para disminuir el riesgo de catástrofe, pero que la responsabilidad se debe compartir con el gobierno local, el sector privado y otros actores.

Recomendaciones y Compromisos

  1. La AMM se compromete a trabajar con otras organizaciones intergubernamentales, incluidas la ONU la OMS, organizaciones de profesionales de la salud y otros interesados en la implementación y el seguimiento de esta agenda y los acuerdos internacionales relacionados y para armonización de políticas y defensa.
  2. La AMM se compromete a colaborar con las asociaciones miembros constituyentes para apoyar su trabajo a nivel regional y nacional y con sus gobiernos en la implementación de la agenda 2030.
  3. La AMM recomienda que las AMNs elaboren estrategias sobre la recopilación de información, implementación, aumento de capacidad y defensa para incrementar la coherencia de políticas y aumentar al máximo la implementación de la agenda 2030 a niveles nacional y global.
  4. La AMM también recomienda que las AMNs colaboren con bancos de desarrollo, ONGs, organizaciones intergubernamentales y otros interesados que también trabajan para implementar la agenda 2030, en especial en sus propios países.
  5. La AMM insta a la ONU y la OMS elaborar normas sobre cómo se implementará el financiamiento de la salud para lograr los objetivos establecidos en la agenda 2030 y las consecuencias económicas de las NCDs, envejecimiento y resistencia antimicrobiana.

 

 

 

Adoptada en la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

Introducción

  1. El turismo de salud es un fenómeno en expansión, aunque hasta la fecha no hay consenso sobre su definición y en consecuencia, las prácticas y los protocolos en los diferentes países pueden variar sustancialmente. Para los fines de esta declaración, el turismo de salud se define como una situación en que los pacientes viajan voluntariamente a través de las fronteras internacionales para recibir tratamiento médico. Los tratamientos abarcan una amplia gama de servicios médicos, e incluyen comúnmente: la atención dental, cirugía estética, cirugía electiva y tratamiento de fertilidad (OCDE, 2011).
  2. Esta declaración no incluye casos en los que un servicio de salud nacional o un hospital envía un paciente al extranjero para recibir tratamiento con el pago del costo o cuando, como en la Unión Europea, los pacientes pueden buscar atención en otro Estado miembro de la UE según criterios definidos legalmente y su sistema de salud cubre los costos. Tampoco incluye situaciones en las que las personas están en un país extranjero cuando se enferman y necesitan atención médica.
  3. Si no se regula apropiadamente, el turismo de salud puede tener repercusiones médico-legales y éticas, al igual que consecuencias negativas, incluidos, pero no limitado a: fuga interna de cerebros, creación de un sistema de salud de dos categorías y la propagación de resistencia antimicrobiana. Por lo tanto, es imperativo que existan reglas claras para regir este creciente fenómeno.
  4. El turismo de salud es una industria global emergente, con los proveedores de servicios de muchos países que compiten por los pacientes extranjeros, cuyo tratamiento representa una fuente potencial importante de ingresos. La conciencia sobre la salud y la voluntad de invertir en ella se crea con el bienestar económico de los países y miles de millones de dólares se invierten cada año en el turismo de salud en todo el mundo. Los actores clave dentro de esta gama de la industria son los consumidores, corredores, gobiernos, proveedores de salud, aseguradoras y agencias de viajes. La proliferación de sitios de turismo de salud en Internet y contenido relacionado plantean preocupación por la información de salud en línea no regulada e inexacta.
  5. Un turista de salud está en una situación más frágil y vulnerable que un paciente en su país de origen. Por lo tanto, es necesaria una sensibilidad adicional por parte del personal en cada etapa del tratamiento y durante la atención del paciente, incluida la estada lingüística y cultural cuando sea posible. Cuando se busca tratamiento médico en el extranjero, la continuidad normal de la atención puede ser interrumpida y por lo tanto, se deben tomar precauciones adicionales.
  6. El turismo de salud tiene varias consecuencias éticas que deben ser consideradas por los interesados. Los turistas de salud reciben atención en instituciones estatales y privadas, las regulaciones deben implementarse en ambos casos. Estas recomendaciones están dirigidas principalmente a los médicos. La AMM insta a otros involucrados en el turismo de salud a adoptar estos principios.

RECOMENDACIONES

Generales

  1. La AMM enfatiza la importancia de crear sistemas de salud en cada país, a fin de evitar un turismo de salud excesivo, como resultado de limitadas opciones de tratamiento en el país del paciente. Los incentivos financieros para viajar fuera del país del paciente por atención médica no deben limitar inapropiadamente el diagnóstico y las alternativas terapéuticas en el país del paciente o restringir el tratamiento o las opciones de derivación.
  2. La AMM llama a los gobiernos a considerar cuidadosamente todas las consecuencias del turismo de salud para el sistema de salud de un país a través de la elaboración de protocolos nacionales completos y coordinados y legislación para el turismo de salud, en consulta y cooperación con todos los interesados pertinentes. Estos protocolos deben evaluar las posibilidades de cada país para recibir turistas de salud, acordar los procedimientos necesarios y evitar impactos negativos para el sistema de salud del país.
  3. La AMM llama a los gobiernos y proveedores de servicios a asegurar que el turismo de salud no afecte de manera negativa el uso adecuado de los recursos limitados de salud o la disponibilidad de atención apropiada para la población local del país que los acoge. Se debe prestar especial atención a los tratamientos con largas esperas o con escasos recursos médicos. El turismo médico no debe promover prácticas contrarias a la ética o ilegales, como el tráfico de órganos. Las autoridades, incluido el Gobierno, deben poder detener el turismo de salud electivo cuando ponga en peligro la capacidad para atender a la población local.
  4. La admisión de turistas de salud nunca debe permitir que distorsione la evaluación normal de la necesidad clínica y cuando corresponda, la creación de listas de espera o listas de prioridad para tratamientos. Una vez que el proveedor de salud acepte para tratamiento, el turista de salud debe ser tratado según la urgencia de su condición médica. Cuando sea posible, los pacientes deben ser derivados a instituciones aprobadas por las autoridades nacionales o acreditadas por organismos de acreditación reconocidos adecuadamente.

Antes de viajar

  1. Se debe informar a los pacientes que las prácticas de tratamiento y la legislación de salud pueden ser diferentes que las de su país y que el tratamiento es proporcionado según las leyes y prácticas del país donde lo recibe. El médico/proveedor de servicios debe informar a los pacientes de sus derechos y recurso legal antes de viajar fuera de su país por atención médica, incluida información sobre recurso legal en caso de lesión del paciente y los posibles mecanismos de compensación.
  2. El médico en el país de destino debe establecer un plan de tratamiento que incluya una estimación del costo y un plan de pago, antes de que el turista de salud viaje a dicho país. Además, el médico y la compañía de turismo de salud (si la hay) deben colaborar para asegurarse de que se tomen todas las medidas en conformidad con las necesidades médicas del paciente. Se debe entregar información al paciente sobre los riesgos potenciales de combinar procedimientos quirúrgicos con vuelos largos y actividades de vacaciones.
  3. Se debe informar al turista de salud que la legislación sobre privacidad no es la misma en todos los países y en el contexto de los servicios suplementarios que recibirá, es posible que su información médica sea comunicada a personas que no son profesionales médicos (como los intérpretes). No obstante, si el turista de salud decide recurrir a estos servicios, se le debe entregar documentación que especifique los servicios prestados por el personal no médico (incluidos los intérpretes) y una explicación sobre quién tendrá acceso a su información médica, se le debe pedir dar su consentimiento para la divulgación necesaria.
  4. Todos los interesados (clínicos y administrativos) involucrados en la atención de los turistas de salud deben conocer sus obligaciones éticas de proteger la confidencialidad. Los intérpretes y otro personal administrativo que tengan acceso a la información de salud del turista de salud deben firmar un acuerdo de confidencialidad.
  5. Se debe informar al turista de salud que un cambio en su condición clínica podría implicar un cambio en el costo estimado y en los planes de viaje y requisitos de visa.
  6. Si el plan de tratamiento es alterado por necesidad médica que queda clara después que se ha establecido el plan inicial, el turista de salud debe ser informado sobre este cambio y su razón. Se debe obtener el consentimiento del paciente para cualquier cambio en el plan de tratamiento.
  7. Cuando un paciente tenga una enfermedad incurable, el médico en el país de destino debe entregarle información precisa sobre sus opciones de tratamiento médico, incluidas las limitaciones del tratamiento, la capacidad del tratamiento de alterar el curso de la enfermedad de manera importante, para aumentar la esperanza de vida y mejorar su calidad de vida. Si después de examinar toda la información, el médico llega a la conclusión de que no es posible mejorar su estado de salud, el médico debe informarlo al paciente y que no realice el viaje.

Tratamiento

  1. Los médicos están obligados a atender a toda persona aceptada para tratamiento, local o extranjera, sin discriminación. Todas las obligaciones detalladas en la legislación y los códigos internacionales de ética médica se aplican por igual a los médicos en sus contactos con los turistas de salud.
  2. Las decisiones médicas sobre el turista de salud las deben tomar los médicos, en cooperación con el paciente, y no el personal acompañante que no es médico.
  3. A discreción de los médicos tratantes y cuando se disponga de información de buena calidad, al paciente no se le debe pedir pruebas que ya haya realizado previamente, salvo cuando sea preciso repetir las pruebas por necesidad clínica.
  4. El paciente debe recibir información sobre su tratamiento en un idioma que comprenda, incluido el derecho a recibir un resumen del progreso y término del tratamiento de parte del médico tratante y la traducción de los documentos, si es necesario.
  5. Se debe lograr un acuerdo antes de iniciar el tratamiento sobre la transferencia de los resultados de las pruebas y las imágenes de diagnóstico al país del paciente.
  6. Cuando sea posible, se debe establecer comunicación entre los médicos en el país de origen y de destino, a fin de asegurar un seguimiento clínico apropiado post atención de los problemas médicos por los que el paciente fue tratado.
  7. El médico que prepara el plan de tratamiento para el paciente debe confirmar el diagnóstico, el pronóstico y los tratamientos que el turista de salud ha recibido.
  8. El paciente debe recibir una copia de sus documentos médicos para la continuidad de la atención y seguimiento en su país. Cuando sea necesario, se le debe dar una lista detallada de instrucciones y recomendaciones médicas para el período después de su partida. Esta información debe incluir una descripción del tiempo de la recuperación esperada y el tiempo necesario antes de viajar a su país, si es posible.

Publicidad

  1. La publicidad de los servicios de turismo médico, por Internet o de cualquier otra forma, debe cumplir con los principios de ética médica aceptados e incluir información detallada sobre los servicios, incluida información sobre las áreas de especialidad del proveedor de servicios y los médicos a los que entrega los beneficios de sus servicios, como también los riesgos del turismo de salud. El acceso al estado de licencia/acreditación de los médicos y las instalaciones, como la información de los resultados debe estar disponible fácilmente. El material publicitario debe incluir que todo tratamiento médico conlleva un riesgo y que pueden existir riesgos adicionales específicos en el contexto del turismo de salud.
  2. Las asociaciones médicas nacionales deben hacer todo lo posible para evitar la publicidad indebida o que atente contra los principios de ética médica, incluida la publicidad que contenga información incorrecta o parcial o que pueda inducir a engaño a los pacientes, como una exageración de los posibles beneficios.
  3. Una publicidad que resalta los atributos positivos de un tratamiento médico específico también debe presentar los riesgos de dicho tratamiento y no debe garantizar los resultados del tratamiento o promover expectativas de beneficios o resultados de tratamiento poco realistas.

Transparencia y prevención de conflictos de intereses 

  1. Los posibles conflictos de intereses pueden ser inevitables para los médicos que tratan a turistas de la salud, incluso a instancias de su institución empleadora. Es esencial que todas las circunstancias clínicas y las relaciones sean tratadas de manera abierta y transparente.
  2. El médico debe ser transparente e informar al turista de la salud todo conflicto de intereses personal, financiero, profesional u otro, real o aparente, que pueda estar relacionado con su tratamiento.
  3. El médico no debe aceptar ningún beneficio, otro que la remuneración por sus servicios, en el contexto del tratamiento médico y no debe ofrecer al turista de la salud ni aceptar de él ninguna oferta comercial o personal mientras exista la relación médico-paciente. Cuando el médico trata al turista de la salud como otro paciente que paga su consulta, se deben aplicar las mismas reglas que con los otros.
  4. El médico debe asegurarse de que todo contrato con una compañía de turismo de salud o un turista de salud no constituya un conflicto de intereses con su empleador actual o con sus obligaciones éticas y profesionales hacia sus pacientes.

Transparencia en el pago y en los honorarios del médico

  1. El plan de tratamiento y la estimación deben incluir un informe detallado de todos los costos, incluido un desglose de los honorarios del médico, como el pago por consulta, por cirugía y honorarios adicionales que pueda tener el paciente: costos de hospital, asistencia quirúrgica, prótesis (si es aparte) y gastos de atención postoperatoria.
  2. El presupuesto puede ser cambiado después que se ha entregado el plan de tratamiento sólo si la condición clínica del paciente ha evolucionado o si las circunstancias han cambiado, de manera que sea imposible anticipar o prevenir. Si el precio fue cambiado, se debe informar al paciente la razón de dicho cambio en el costo de la manera más oportuna posible.

 

Adoptada por la 57a Asamblea General de la AMM, Pilanesberg, Sudáfrica, octubre 2006
y enmendada por la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

 

Introducción

La pandemia de gripe ocurre aproximadamente tres o cuatro veces cada siglo. Por lo general se da cuando aparece un nuevo virus de la gripe A que se transmite fácilmente de una persona a otra contra la cual el ser humano tiene poca o ninguna inmunidad. El control de la infección y las medidas de alejamiento social pueden contribuir a ralentizar la propagación del virus. Parece ser difícil fabricar una vacuna cuando no se puede predecir con precisión la cepa de la gripe que aparecerá. El suministro adecuado de antivirales es clave para tratar a las poblaciones en riesgo y controlar una mayor propagación del brote.

La gripe aviar es una infección zoonótica de las aves silvestres y de corral que puede causar infecciones esporádicas al ser humano. Los pájaros infectados tienen gran cantidad de virus en sus heces, mucosas y saliva. Además, un nuevo virus pandémico se podría desarrollar si un ser humano se infecta simultáneamente con los virus de gripe aviar y humana, lo que resulta en un intercambio de genes y una nueva cepa del virus para la que pueda no haber inmunidad. Los humanos se infectan si están expuestos al virus a través de la boca, ojos o con la inhalación de partículas del virus. También hay evidencia limitada de casos de transmisión de un humano a otro.

Esta declaración junto con la Declaración sobre Epidemias y Pandemias proporciona orientación a las asociaciones médicas nacionales y médicos sobre cómo pueden participar en el proceso de planificación de una pandemia o para enfrentar una pandemia de gripe o gripe aviar en sus respectivos países.

Recomendaciones

Gripe Aviar

En el caso de un brote de gripe aviar, se deben tomar las siguientes medidas:

  • Evitar las fuentes de exposición cuando sea posible, ya que es la medida de prevención más eficaz.
  • Utilizar un equipo de protección individual y adoptar medidas de higiene de las manos para toda persona que manipule aves, como también para el personal de salud.
  • Toda ave infectada/expuesta debe ser destruida y eliminar adecuadamente los cadáveres. Desinfectar rigurosamente las granjas o ponerlas en cuarentena.
  • Mantener reservas de vacunas y fármacos antivirales para utilizar durante el brote de la gripe.
  • Se pueden utilizar medicamentos antivirales, como inhibidores de la neuraminidasa.

Preparación para una pandemia de gripe

OMS y autoridades de salud pública nacionales

  • La coordinación de una respuesta internacional a una pandemia de gripe es responsabilidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La OMS utiliza actualmente un enfoque de todos los peligros y riesgos para permitir una respuesta coordinada basada en diversos grados de gravedad de la pandemia.

La OMS debiera:

  • Ofrecer una asistencia técnica y de laboratorio a los países afectados si es necesario y monitorear continuamente los niveles de actividad de las cepas de la gripe, asegurar si es necesario la declaración de “urgencia de salud pública a nivel internacional” de manera oportuna.
  • Monitorear y coordinar los procesos a través delos cuales los gobiernos comparten los materiales biológicos, incluidas las cepas de virus y otros, para facilitar la fabricación de vacunas y asegurar su acceso a nivel mundial.
  • Comunicar lo más pronto posible información disponible sobre la actividad de la gripe a fin de permitir una respuesta oportuna.

Se insta a los gobiernos nacionales a elaborar un plan de acción nacional para abordar los siguientes puntos:

  • Asegurar que exista capacidad local adecuada de diagnóstico y vigilancia para permitir un monitoreo continuo de la actividad de la gripe en el país.
  • Considerar la capacidad de reacción de los hospitales, laboratorios e infraestructura de salud pública y mejorarla si es necesario.
  • Identificar los marcos legales y éticos como también las estructuras de gobernanza relativas a la planificación de la pandemia.
  • Identificar los mecanismos y las autoridades pertinentes para iniciar e intensificar las intervenciones para ralentizar la propagación del virus en la comunidad, como el cierre de colegios, cuarentena, cierre de fronteras, etc.
  • Preparar la comunicación de riesgos y las estrategias y mensajes para evitar el miedo y la ansiedad de la población y los medios de comunicación.
  • Se insta también a los gobiernos a compartir los materiales biológicos, principalmente las cepas de virus y otros, para facilitar la fabricación de vacunas y asegurar su acceso a nivel mundial.
  • Asegurar que los esfuerzos de diagnóstico y vigilancia sean continuos y que existan adecuadas reservas de vacunas y medicamentos antivirales.
  • Establecer protocolos para gestionar a los pacientes en la comunidad, realizar una clasificación en establecimientos de salud, proporcionar una gestión de ventilación y de gestionar los desechos infecciosos.
  • La atribución de dosis de vacunas, antivirales y camas de hospital debe ser coordinada con los expertos.
  • La prioridad de vacunación debe darse a los grupos de más alto riesgo, incluidos los que mantienen servicios básicos, incluidos los servicios de salud.
  • Proporcionar orientación e información oportunas a los departamentos de salud regionales, organizaciones de salud y médicos.
  • Prepararse para un aumento de la demanda de servicios de salud y la falta de profesionales de la salud, en especial si la gravedad de la enfermedad es alta. En este caso, la clasificación por prioridad y la coordinación de los recursos disponibles es esencial. Esto puede incluir aprovechar la capacidad del sector privado cuando los recursos estatales son insuficientes.
  • Asegurar que exista un financiamiento adecuado para la preparación y respuesta a una pandemia y también a sus consecuencias sanitarias y sociales.
  • Asegurarse que los mecanismos estén implementados para garantizar la seguridad de los establecimientos de salud, el personal y las cadenas de suministro de vacunas y antivirales.
  • Promover y financiar la investigación para desarrollar vacunas y tratamientos eficaces y de efectos duraderos contra la gripe.
  • Fomentar la colaboración entre la medicina humana y la veterinaria en la prevención, la investigación y control de la gripe aviar.

Se insta a las asociaciones médicas nacionales a:

  • Definir su participación en el plan nacional de preparación para la pandemia de gripe, que puede incluir un mayor desarrollo de capacidad en los médicos, participación en elaboración de directrices y comunicación con los profesionales de la salud.
  • Ayudar a informar a la población sobre la pandemia de gripe aviar.
  • Cuando sea posible, coordinar con otras organizaciones de profesionales de la salud y otras AMNs para identificar problemas comunes y políticas congruentes relativas a la preparación y respuesta a la pandemia de gripe.
  • Considerar la implementación de estrategias de apoyo para los miembros involucrados en la respuesta, incluidos los servicios de salud mental, los equipos de intervención de urgencia y los suplentes.
  • Defender antes y durante una pandemia para la asignación de recursos adecuados a fin de satisfacer las necesidades previsibles y nuevas en salud, pacientes y la población en general.
  • Instar al personal de la salud a protegerse a través de la vacunación.
  • Elaborar sus propios planes de contingencia de organización para asegurar el apoyo continuo de sus miembros.

Médicos:

  • Los médicos deben conocer suficientemente las pandemias de gripe y los riesgos de transmisión, incluida la epidemiología local, nacional e internacional.
  • Los médicos deben implementar medidas de control de la infección y vacunación, a fin de proteger a su personal y a ellos mismos durante las pandemias de gripe y brotes de temporadas.
  • Los médicos deben participar en la planificación y formación para la preparación de las pandemias de gripe locales/regionales.
  • Elaborar planes de contingencia para enfrentar las posibles interrupciones de los servicios básicos y la falta de personal.

Adoptada por la 58a Asamblea General de la AMM, Copenhague, Dinamarca, octubre 2007
enmendada por la 
69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018
y cancelada y archivada por la 73ª Asamblea General de la AMM, Berlín, Alemania, octubre 2022

DEFINICION

La telemedicina es el ejercicio de la medicina a distancia, cuyas intervenciones, diagnósticos, decisiones terapéuticas y recomendaciones de tratamientos subsiguientes están basadas en datos de los pacientes, documentos y otra información transmitida a través de sistemas de telecomunicación. La telemedicina puede realizarse entre un médico y un paciente o entre dos o más médicos, incluidos otros profesionales de la salud.

INTRODUCCION

  • El desarrollo y la implementación de la tecnología de información y comunicación crean nuevas formas diferentes de ejercer la medicina. prestar atención médica a los pacientes. La telemedicina se utiliza para los pacientes que no pueden ver un médico oportunamente por inaccesibilidad debido a la distancia, discapacidad física, empleo, compromisos familiares (incluido el cuidado de otros), costo para el paciente y horarios de los médicos. Tiene la capacidad de llegar a algunos pacientes con acceso limitado a la asistencia médica y tiene potencial de mejorar la atención médica.
  • La consulta presencial entre el médico y el paciente es la regla de oro de la atención clínica.
  • Los servicios de la telemedicina deben ser consistentes con los servicios presenciales y respaldados con evidencia.
  • Los principios de la ética médica que son obligatorios para la profesión también deben ser respetados en la práctica de la telemedicina.

PRINCIPIOS

Cuando se practica la telemedicina el médico debe respetar las siguientes normas éticas:

1. La relación médico-paciente debe estar basada en un examen personal y conocimiento suficiente del historial médico del paciente. la telemedicina debe ser utilizada principalmente en situaciones en las que el médico no puede estar presente físicamente en un tiempo seguro y aceptable. También se puede usar en la gestión de enfermedades crónicas o del seguimiento después del tratamiento inicial, cuando se haya probado que es segura y eficaz.

2. La relación médico-paciente en la telemedicina debe estar basada en la confianza y respeto mutuas. por lo tanto, es esencial que el médico y el paciente puedan identificarse con confianza cuando se utiliza la telemedicina. En el caso de consultas entre dos o más profesionales en o entre jurisdicciones diferentes, el médico principal es responsable por la atención y la coordinación del paciente con el equipo médico distante.

3. La relación médico-paciente en la telemedicina debe estar basada en la confianza y respeto mutuas. por lo tanto, es esencial que el médico y el paciente puedan identificarse con confianza cuando se utiliza la telemedicina. En el caso de consultas entre dos o más profesionales en o entre jurisdicciones diferentes, el médico principal es responsable por la atención y la coordinación del paciente con el equipo médico distante.

4. El consentimiento informado adecuado requiere que toda la información necesaria sobre los distintos aspectos de las consultas por telemedicina sea explicada a fondo a los pacientes, incluido, pero no limitado a:

  • explicar cómo funciona la telemedicina,
  • cómo reservar citas,
  • aspectos de privacidad,
  • la posibilidad de fallas tecnológicas, incluidas violaciones de la confidencialidad,
  • protocolos de contacto durante las consultas virtuales,
  • políticas de prescripción y
  • coordinación de atención con otros profesionales de la salud de manera clara y comprensible, sin influenciar la decisión del paciente.

5. Los médicos deben tener en cuenta de que ciertas tecnologías de la telemedicina podrían ser inasequibles para los pacientes y por esto impedir su acceso. Un acceso desigual a la telemedicina puede ampliar aún más la brecha en salud entre ricos y pobres.

Autonomía y privacidad del médico

6. El médico no debe utilizar la telemedicina si infringe el marco legal o ético del país.

7. La telemedicina puede violar potencialmente la privacidad del médico debido a la disponibilidad las 24 horas del día. El médico debe informar a los pacientes la disponibilidad y recomendar servicios como las urgencias cuando no esté accesible.

8. El médico debe ejercer su autonomía profesional al decidir si una consulta por telemedicina versus una presencial es apropiada.

9. El médico debe ejercer su autonomía y discreción al seleccionar la plataforma de telemedicina que utilizará.

Responsabilidades del médico

10. El médico al que se le pide su opinión a través de la telemedicina debe mantener un registro detallado de los consejos que entrega, como también de la información recibida en la cual basó su consejo para asegurar la trazabilidad.

11. Si se toma la decisión de usar la telemedicina, es necesario asegurarse que los usuarios (el paciente y los profesionales de la salud) puedan utilizar el sistema de telecomunicación necesario.

12. El médico debe tratar de asegurarse que el paciente haya comprendido el consejo y las sugerencias de tratamiento entregadas y en lo posible tome medidas para promover la continuidad de la atención.

13. El médico que pide a otro médico consejo o una segunda opinión es responsable del tratamiento y de otras decisiones y recomendaciones dadas al paciente.

14. El médico debe estar consciente y respetar las dificultades e incertidumbres que puedan presentarse cuando esté en contacto con el paciente a través de la telecomunicación. El médico debe estar preparado a recomendar un contacto directo médico-paciente cuando estime que es en beneficio del paciente.

15. El médico sólo debe utilizar la telemedicina en países/jurisdicciones donde tenga licencia para emplearla. Las consultas de jurisdicciones cruzadas sólo deben permitirse entre dos médicos.

16. El médico debe asegurarse que su seguro médico incluye la telemedicina.

Calidad de la atención

17. Se deben utilizar regularmente medidas de evaluación de la calidad de la atención para asegurar la seguridad del paciente y el mejor diagnóstico y prácticas de tratamiento posibles en la telemedicina. La prestación de servicios de telemedicina debe seguir las normas de práctica en base a evidencia hasta donde estén disponibles para asegurar la seguridad del paciente, la calidad de la atención y los resultados de salud positivos. Al igual que todas las intervenciones de salud, se debe probar la eficacia, seguridad, viabilidad y rentabilidad de la telemedicina.

18. Las posibilidades y debilidades de la telemedicina en emergencias deben ser identificadas debidamente. Si es necesario utilizar la telemedicina durante una emergencia, los consejos y sugerencias de tratamientos son influenciados por la gravedad de la condición del paciente y la competencia de las personas que están con el paciente. Las entidades que prestan servicios de telemedicina deben establecer protocolos para los casos de emergencias.

RECOMENDACIONES

  1. La telemedicina se debe adaptar apropiadamente a los marcos reguladores locales, que pueden incluir la licencia de plataformas de telemedicina para beneficio del paciente.
  2. Cuando sea apropiado, la AMM y las asociaciones médicas nacionales deben promover la creación de normas éticas, de práctica, legislación nacional y acuerdos internacionales sobre asuntos relacionados con el uso de la telemedicina, mientras se protege la relación médico-paciente, la confidencialidad y la calidad de la atención médica.
  3. La telemedicina no debe considerarse igual a una atención médica presencial y no debe utilizarse sólo para reducir costos o como un incentivo perverso para servicios excesivos y aumentar las ganancias para los médicos.
  4. El uso de la telemedicina requiere que la profesión identifique explícitamente y gestione las consecuencias adversas en relaciones de compañerismo y patrones de referencia.
  5. Las nuevas tecnologías y estilos de la integración de la práctica pueden necesitar nuevas normas y estándares.
  6. Los médicos deben presionar por una telemedicina ética en beneficio del paciente.

 

Adoptada por la 59a Asamblea General de la AMM, Seúl, Corea, octubre 2008
y enmendada por la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Islandia, octubre 2018

 

La AMM reafirma la Declaración de Madrid sobre Regulación Profesional.

La Asociación Médica Mundial, reconoce la esencia natural de la autonomía profesional y la independencia clínica del médico y establece que:

  1. La autonomía profesional y la independencia clínica son elementos esenciales para prestar atención médica de calidad a todos los pacientes y poblaciones. La autonomía y la independencia profesionales son esenciales para prestar una atención médica de alta calidad y por ende en beneficio de los pacientes y la sociedad.
  2. La autonomía profesional y la independencia clínica describen el proceso en el que el médico tiene la libertad de expresar su opinión profesional con respecto a la atención y al tratamiento de sus pacientes, sin influencia indebida o inapropiada de partes o personas externas.
  3. La medicina es muy compleja. A través de una larga formación y experiencia, el médico se convierte en un experto médico que considera evidencia para aconsejar a los pacientes. Puesto que los pacientes tienen derecho a la autodeterminación y decidir con ciertas limitaciones qué intervenciones médicas realizarán, esperan que los médicos tengan la libertad de sugerir recomendaciones clínicamente apropiadas.
  4. Los médicos reconocen que deben considerar la estructura del sistema de salud y los recursos financieros cuando tomen decisiones sobre tratamientos. Las restricciones irracionales a la independencia clínica impuestas por los gobiernos y administradores no son apropiadas para el interés superior del paciente, porque puede que no estén basadas en evidencia y corren el riesgo de afectar la confianza que es elemento esencial en la relación médico-paciente.
  5. La autonomía professional está limitada a la observancia de las reglas profesionales, normas y la base de evidencia.
  6. El establecimiento de prioridades y las limitaciones en la cobertura de salud son esenciales debido a los recursos limitados. Los gobiernos, los financiadores de la salud (tercer pagador), administradores y organizaciones de atención administrada pueden interferir en la autonomía clínica al tratar de imponer reglas y limitaciones. Esto puede que no refleje los principios de medicina en base a evidencia, rentabilidad y beneficio del paciente. Estudios de evaluación económica se pueden realizar desde una perspectiva del financiador y no del usuario que ponen más énfasis en la reducción de costos en lugar de los resultados en salud.
  7. Los procesos de establecimiento de prioridades, toma de decisiones sobre financiamiento y destinación/limitación de recursos a menudo no son transparentes. Esto prolonga las desigualdades en salud.
  8. Algunos administradores de hospitales y los terceros que financian consideran que la autonomía profesional del médico es incompatible con el manejo prudente de los costos de salud. La autonomía profesional permite a los médicos ayudar a los pacientes a tomar decisiones informadas y apoyar a los médicos si rechazan las solicitudes de pacientes y familiares para acceder a tratamientos y servicios inapropiados.
  9. La atención médica la prestan equipos de profesionales de la salud, por lo general liderados por médicos. Ningún miembro del equipo debe interferir en la autonomía profesional y la independencia clínica del médico que asume la responsabilidad final de la atención del paciente. En las situaciones en que otro miembro del equipo tenga dudas clínicas sobre el tratamiento propuesto, debe existir un mecanismo para expresar dichas dudas sin miedo a represalias.
  10. La prestación de atención médica que realizan los médicos está regida por reglas éticas, normas profesionales y la legislación vigente. Los médicos contribuyen a la elaboración de normas y reconocen que ellas regulan su trabajo como profesionales y proporcionan seguridad al público.
  11. Los comités de ética, comités de credenciales y otras formas de revisión por la profesión han sido establecidos desde hace tiempo, reconocidos y aceptados por la medicina organizada para controlar la conducta profesional del médico y, cuando corresponde, pueden imponer restricciones razonables sobre la libertad profesional absoluta del médico.
  12. La Asociación Médica Mundial reafirma que la autonomía profesional y la independencia clínica son componentes esenciales de la atención médica de alta calidad y la relación médico-paciente que deben ser preservadas. La AMM también afirma que la autonomía profesional y la independencia clínica son elementos centrales del profesionalismo médico.

Adoptada por la 68ª Asamblea General de la AMM, Chicago, Estados Unidos, octubre 2017

 

INTRODUCCIÓN

Los objetivos de la educación médica son preparar a los médicos en ejercicio para aplicar los últimos descubrimientos científicos en la promoción de la salud, prevención y tratamiento de enfermedades que afectan al ser humano y comunicar las normas éticas de pensamiento y conducta del médico. Todos los médicos tienen la responsabilidad consigo mismo y con la profesión  y sus pacientes de mantener altos niveles de formación médica básica.

Los programas de garantía de la calidad bien planificados e implementados son esenciales para asegurar que las escuelas de medicina logren estos objetivos y expectativas. Existen muchas amenazas a la calidad de la educación médica básica. La capacidad de ofrecer un alto nivel de educación puede verse afectada  la disponibilidad de infraestructura y recursos clínicos, el nivel de preparación de la facultad, y la condición económica. También la educación médica básica en todo el mundo está en crecimiento, con un rápido aumento en el número de escuelas de medicina en algunos países y es causa de preocupación por la calidad de los graduados. Un programa de garantía de calidad bien elaborado permite que las escuelas identifiquen y aborden las condiciones que amenazan la calidad de su educación médica básica. Estos programas deben ser implementados en lo posible en las escuelas de medicina del mundo.

ANTECEDENTES

Las normas elaboradas para una escuela de medicina están hechas para reflejar lo que la escuela considera medidas de calidad importantes. Las revisiones institucionales que utilizan estas normas elaboradas internamente pueden asegurar que la misión de la escuela de medicina se cumpla y que los estudiantes sean preparados para lograr los resultados deseados. La utilización de un programa institucional de garantía de calidad que tiene sus propios criterios definidos y cuenta con el apoyo de personal capacitado puede ser importante para asegurar la garantía de la calidad a lo largo del tiempo.

Sin embargo, es más probable que se obtenga un mejor resultado si también se incluye una segunda dimensión de la revisión con una perspectiva externa. Un sistema de garantía de calidad nacional incluye normas de calidad elaboradas y aprobadas a nivel nacional o regional. La evaluación de una escuela de medicina en base a lo que espera un país o region de sus programas  de educación médica básica lleva a un nivel de preparación de estudiantes más alto y consistente.

A menos que se exija a las escuelas de medicina el cumplimiento de las normas establecidas por un sistema de evaluación nacional, no existe ninguna garantía que las escuelas realicen una evaluación interna o corrijan problemas que interfieran con la calidad de la educación. La Asociación Médica Mundial (AMM) reconoce la necesidad y la importancia de normas globales sólidas para asegurar la calidad de los programas de educación médica básica.

Un sistema de acreditación/reconocimiento es un mecanismo de garantía de calidad que es cada vez más común en todo el mundo. Los sistemas de acreditación / reconocimiento están basados en los estándares de calidad educacional que se han elaborado para satisfacer las necesidades nacionales y que utilizan procesos válidos, fiables y ampliamente aceptados para evaluar el alcance  de estas normas en las escuelas de medicina. Una vez que se evalúa el cumplimiento de las normas, es necesaria la cooperación y la coordinación entre los diversos grupos interesados dentro como fuera de una escuela de medicina para implementar soluciones a los problemas identificados.

PRINCIPIOS PARA LOS SISTEMAS DE ACREDITACIÓN

Un sistema de acreditación revisa los programas educativos o las instituciones que utilizan un conjunto predeterminado (típicamente nacional) de las normas de proceso y resultados. Los sistemas de acreditación que existen en todo el mundo difieren en varias maneras. En algunos países, la acreditación de las escuelas de medicina se ha hecho por décadas; en otros  países, la acreditación es relativamente nueva. La participación en la acreditación puede ser obligatoria o voluntaria para las escuelas de medicina y las revisiones pueden realizarse en diferentes intervalos.

La acreditación se define como la evaluación de los programas educativos o las instituciones sobre la base de un conjunto claro y específico de estándares. Las normas  de acreditación deben ser articuladas como estándares que han sido elaborados con las necesidades nacionales en mente y con la colaboración de grupos de interesados pertinentes en el país.

Ciertos principios generales deben formar la base de un sistema de acreditación para asegurar que el proceso sea válido y las decisiones relacionadas con la calidad del programa educativo sean dignas de confianza. Estos principios incluyen la transparencia, la falta de conflicto de intereses, y la fiabilidad / consistencia. La transparencia requiere que le normas de acreditación y procesos sean conocidas y comprendidas por las escuelas, evaluadores y los responsables de decisiones. Para reducir la posibilidad de conflictos de interés, los evaluadores y los encargados de tomar decisiones no deben tener ningún vínculo con la institución que se está evaluando que pueda afectar su capacidad de tener una opinión libre de sesgo positivo o negativo. La fiabilidad  y consistencia requieren que haya un entendimiento común de lo que constituye el cumplimiento de las normas y que, en la medida de lo posible, esta comprensión se aplique sistemáticamente en los exámenes y las decisiones a través de las escuelas.

Las normas de acreditación son medibles, pero no tienen que ser cuantitativas. Las normas son elaboradas normalmente  tanto para el proceso y los resultados de un programa de educación médica. La información específica debe ser identificada para evaluar el cumplimiento. Por ejemplo, las normas relacionadas con el proceso pueden abordar el objetivo y la estructura del plan de estudios, las calificaciones de los estudiantes que entran y profesores de la facultad, y la disponibilidad de recursos para el apoyo del programa, incluidas las finanzas adecuadas profesorado suficiente y una infraestructura educativa adecuada para las fases científicas y clínicas de la formación. Los resultados del programa de educación médica son  evaluados para determinar si los graduados han sido preparados adecuadamente en función de los objetivos de la escuela.

Para ser más eficaz, las normas utilizadas en la acreditación necesitan ser ampliamente difundidas y explicadas a fondo para que las escuelas de medicina, evaluadores y los responsables de decisiones compartan un entendimiento común de su significado y las expectativas para el cumplimiento. Para la eficacia del proceso y la transparencia, la facultad de la escuela de medicina, los evaluadores que revisan el cumplimiento de las escuelas de medicina con los estándares de acreditación y los que adoptan decisiones y toman la determinación definitiva de la acreditación requieren una formación.

Una institución habrá logrado sus objetivos cuando se realiza un monitoreo permanente del cumplimiento de las normas de acreditación y cuando el monitoreo interno es una responsabilidad formal de uno o más individuos en la escuela de medicina que tiene acceso a información pertinente vinculada con la calidad (tales como los resultados de las encuestas de satisfacción de los estudiantes y los datos de rendimiento de los estudiantes). La revisión en curso de algunos o todos los estándares de acreditación permite a las escuelas corregir las áreas problemáticas antes de que sean identificadas como parte de la revisión formal de la acreditación y asegura que el programa educativo siga siendo de alta calidad.

Si una revisión de la acreditación identifica áreas que deben mejorarse, la escuela de medicina debe corregir las deficiencias pronto. El organismo de acreditación / reconocimiento normalmente establece un calendario de seguimiento al final del cual el programa educativo debe poder demostrar que se han adoptado medidas y se han logrado resultados. Esto puede requerir que la escuela de medicina / universidad debe proporcionar los recursos financieros y otros, incluido el tiempo y esfuerzo de la facultad y la infraestructura que se necesitan para hacer las correcciones necesarias.

Con el fin de ayudar a las escuelas a tratar las deficiencias identificadas, el apoyo y consulta podrían ser proporcionadas por el personal del organismo de acreditación o demás personas con formación. Para evitar conflictos de intereses, los que realizan consultas no deben tomar parte en las revisiones de la acreditación o en las decisiones sobre el estado de ésta.

RESPONSABILIDADES DE LOS GRUPOS INTERESADOS DENTRO Y FUERA DE LAS ESCUELAS DE MEDICINA

El establecimiento de un sistema de acreditación que cumpla con los principios de validez y confiabilidad requiere medidas de una variedad de grupos interesados, como por ejemplo:

  • Las entidades que patrocinan los organismos de acreditación (por ejemplo, gobiernos, asociaciones médicas) deben asegurar que la entidad de acreditación esté financiada apropiadamente y cuente con personal para sus actividades. El financiamiento puede provenir de los patrocinadores o de la capacidad del organismo de acreditación para generar fondos propios de las tasas de revisión de la acreditación. Los organismos de acreditación en algunos países pueden requerir financiamiento y dotación de personal adicional para hacer frente al aumento en el número de escuelas de medicina.
  • Es aconsejable que los directivos de las escuelas fomenten un ambiente que valore las actividades de garantía de calidad educacional. La facultad deben tener el tiempo y ser reconocida por su participación en las actividades de evaluación de programas y acreditación. Los estudiantes de medicina deben estar preparados e instados a proporcionar información sobre todos los aspectos pertinentes del programa de educación médica.

 

RECOMENDACIONES

La AMM llama a las asociaciones médicas nacionales (AMNs) a instar a las escuelas de medicina a elaborar programas de garantía de calidad para apoyar la revisión en curso de la calidad del programa educacional.

La AMM insta a las AMNs a apoyar y promover el desarrollo continuo de los sistemas de acreditación / reconocimiento nacionales y regionales de las escuelas de medicina. Estos sistemas deben estar diseñados y dirigidos por los médicos, en colaboración con  educadores médicos experimentados y con participación de otros expertos pertinentes.

La AMM llama a las AMNs a instar a los gobiernos nacionales y responsables del sector privado a asegurar que el sistema nacional de acreditación tenga los recursos adecuados y apropiados para sus actividades. Esto incluye un financiamiento suficiente y consistente para el apoyo a la infraestructura y el personal del organismo de acreditación.

La AMM recomienda que los sistemas de acreditación utilicen normas pertinentes a nivel nacional aplicadas de manera consistente por evaluadores y responsables con formación cuando realicen una revisión de las escuelas de medicina.

La AMM insta a las AMNs a abogar ante los responsables de decisiones  que la participación en el sistema nacional de acreditación debe ser requerido para todas las escuelas de medicina dentro de un país.

La AMM llama a las AMNs a instar a los sistemas nacionales de acreditación a participar en las revisiones externas de sus políticas, prácticas y normas. Esto puede incluir la búsqueda de reconocimiento por parte de la Federación Mundial de Educación Médica (WFME). Se insta a los organismos de acreditación reconocidos y organizaciones similares a establecer un foro de debate y cooperación entre los organismos nacionales de acreditación para compartir las mejores prácticas y mecanismos para superar los desafíos.

Se debe instar a los médicos a dirigir y participar activamente en las actividades de acreditación nacionales como evaluadores y responsables de decisiones y en las actividades de garantía de la calidad en sus propias escuelas de medicina.

Adoptadas por la 18a Asamblea Médica Mundial Helsinki, Finlandia, junio 1964,
enmendadas por la 35a Asamblea Médica Mundial Venecia, Italia, octubre 1983
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

  1. Las poblaciones rurales tienen el mismo derecho a la atención médica que tienen las poblaciones urbanas. Aunque los factores económicos y otros puedan afectar la cantidad de servicios médicos disponibles en las zonas rurales, en la calidad de esos servicios no debe existir disparidad. Deben hacerse esfuerzos persistentes para elevar al más alto nivel en la nación las calificaciones de todas las personas que prestan servicio médico.
  2. El conocimiento y estudio analítico de los hechos es necesario para las poblaciones rurales, porque provee la información precisa para la organización y desarrollo de servicios de salud mejor adaptados a esas regiones.
  3. El nivel de educación y el nivel socio-económico de las comunidades rurales son interdependientes. La educación de salud del público se realiza en forma mucho más efectiva cuando las agencias, las organizaciones, las profesiones de salud y la comunidad contribuyen al desarrollo y mantenimiento del más alto nivel de higiene en salud que pueda ser mutuamente conseguido.
  4. En el desarrollo de los servicios de salud en áreas rurales, la relación médico-paciente debe ser protegida.
  5. Es el deber del Gobierno velar porque las condiciones de trabajo ofrecidas en el campo de la Salud Pública sean suficientemente interesantes para que permitan el desarrollo de los servicios de salud rurales, al mismo nivel que el de las zonas urbanas.
  6. Conviene asegurar una coordinación adecuada del programa y de los equipos de medicina preventiva y curativa, y de la educación médica y de salud entre regiones rurales y regiones urbanas.
  7. Debe hacerse todo lo posible para que solamente médicos titulados tengan responsabilidades clínicas en centros rurales de salud. El empleo de auxiliares para efectuar tareas médicas debe ser únicamente temporario. El personal de salud rural debe ser suficiente en número y recibir un adiestramiento que le permita responder eficientemente a las necesidades médicas de la población y que sus conocimientos técnicos estén al día.
  8. El adiestramiento de los auxiliares médicos, particularmente el de los enfermeros, enfermeras y matronas, debe corresponder al grado de cultura y de educación del país, a fin de ampliar así el número de personas disponibles para las áreas rurales. La profesión médica debe prestar todo su apoyo para proporcionar a este grupo cursos básicos, de post-título y de perfeccionamiento.
  9. El carácter particular de las enfermedades en las regiones rurales exige la colaboración de los médicos con los especialistas en las diversas disciplinas relacionadas.
  10. El cuerpo médico debe guiar y orientar la educación de salud de las poblaciones rurales. Es esencial que exista entre los médicos y la población rural un espíritu de cooperación a fin de lograr el más alto nivel de educación de salud que sea posible.
  11. Las Asociaciones Médicas Nacionales deben tratar por todos los medios de garantizar que los médicos rurales practiquen su profesión en condiciones no menos favorables que las de médicos urbanos.
  12. Las asociaciones médicas nacionales deben tomar parte activa en el desarrollo de proyectos para mejorar las condiciones de salud en las regiones rurales.

Adoptada por la 42a Asamblea Médica Mundial Rancho Mirage, California, EE.UU., octubre 1990
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

  • LA ASOCIACION MEDICA MUNDIAL reconoce que el tabaco es peligroso para la salud del ser humano. Véase la Declaración de la AMM sobre los Peligros del Tabaco para la Salud, adoptada en septiembre de 1998.
  • POR LO TANTO la Asociación Médica Mundial exhorta a todas las naciones a proteger la salud pública adoptando prohibiciones o restricciones sobre la fabricación, importación, exportación, venta o publicidad del tabaco.
  • ADEMAS la Asociación Médica Mundial exhorta a todas las asociaciones médicas nacionales para que establezcan medidas apropiadas para apoyar la adopción de prohibiciones o restricciones sobre la fabricación, importación, exportación, venta o publicidad del tabaco, por parte de los gobiernos de sus respectivos países.

Adoptada por la 36a Asamblea Médica Mundial Singapur, octubre 1984
y enmendada por la 38a Asamblea Médica Mundial Rancho Mirage, California, EE.UU., octubre 1986
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

Aquellos que están a cargo de la dirección de los programas de educación médica en cada país, deben dar a conocer a sus estudiantes la importancia de obtener experiencia en la práctica médica, a fin de adquirir un conocimiento médico básico y la necesidad de tener una experiencia médica continua para poder mantener dicho conocimiento. Se debe también informar a los estudiantes de medicina que la aplicación de los estudios médicos a otros campos de trabajo es sumamente limitada.

Cuando no se tiene la seguridad de que el estudiante tenga la oportunidad de adquirir la experiencia necesaria para alcanzar un conocimiento básico, debe solicitarse al estudiante que reconsidere el valor de la educación médica.

Adoptada por la 36a Asamblea Médica Mundial Singapur, octubre 1984,
y enmendada por la 38a Asamblea Médica Mundial Rancho Mirage, California, EE.UU., octubre 1986
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

  • CONSIDERANDO QUE, el propósito de la Asociación Médica Mundial es servir a la humanidad mediante el esfuerzo por alcanzar los niveles más altos en educación médica, y
  • CONSIDERANDO QUE, tla Asociación Médica Mundial y sus asociaciones médicas nacionales miembros han siempre favorecido la educación médica de alta calidad, y
  • CONSIDERANDO QUE, la calidad de la atención médica prestada por los médicos no puede ser superior a la calidad de la educación médica que ellos han recibido,
  • POR LO TANTO,la Asociación Médica Mundial reafirma su apoyo a las normas elevadas de educación médica que permitan una experiencia educacional de alta calidad a todo estudiante de medicina, yQue sólo los candidatos debidamente capacitados sean admitidos para estudiar medicina, y

    Que el número de estudiantes aceptados para seguir los estudios de medicina no sea superior al número que, según los recursos educacionales disponibles, puede recibir una formación educacional de alta calidad.

    Que las condiciones a exigir a los candidatos a ser admitidos a las escuelas de medicina, sean establecidas según el el criterio objetivo de las facultades de medicina.

Adoptada por la 35a Asamblea Médica Mundial Venecia, Italia, octubre 1983,
enmendada por la 38a Asamblea Médica Mundial Rancho Mirage, California, EE.UU., octubre 1986
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

La Asamblea de la Asociación Médica Mundial en Venecia, el 28 de octubre de 1983, llama a todas las asociaciones médicas nacionales para que trabajen en busca de una solución a los problemas que emergen en relación a los recursos humanos médicos.

Reconociendo la necesidad:

  1. de que todas las personas tengan acceso a la atención médica de más alta calidad y
  2. de mantener los niveles en la atención médica que den como resultado la prestación de una atención médica de alta calidad, así como
  3. de proveer el desarrollo de nuevos conocimientos, destrezas y técnicas que estimulen el progreso de la ciencia médica.

La Asamblea insta a todas las asociaciones médicas nacionales a que trabajen con sus gobiernos en la promulgación de las leyes respectivas para alcanzar dichas metas.

La atención médica de alta calidad y la mantención y desarrollo de las habilidades y técnicas de un médico, así como el descubrimiento de información y nuevos conocimientos están ligados inseparablemente a las oportunidades que tiene el médico de dar atención a los pacientes y de lograr experiencia clínica. Este principio debe ser reconocido en cualquier solución de los problemas de recursos humanos médicos, y la preocupación política y económica debe estar subordinada a este principio.

Lo que es más importante, el principio precedente debe ser reconocido y aplicado a las leyes y políticas que rigen las escuelas de medicina, de manera que se puedan asegurar los más altos niveles de calidad en la atención médica para las generaciones futuras.

Adoptada por la 30ª Asamblea Médica Mundial Sao Paulo, Brasil, octubre 1976,
enmendada por la 36ª Asamblea Médica Mundial Singapur, octubre 1984
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

Introduccion

La Asociación Médica Mundial, después de haber considerado el problema de la contaminación en su Conferencia Científica, en Sao Paulo en 1976, hace notar la importancia del equilibrio ecológico entre la población y su medio, y recalca el hecho de que conforme los países experimentan un desarrollo social y económico, deben tomar las medidas para mejorar la calidad de su ambiente.

El problema de la contaminación afecta no sólo la vida y belleza del medio ambiente, sino que constituye también una creciente amenaza para la salud misma de los seres humanos que lo ocupan. Es así como los médicos deben tener un rol importante en la prevención de enfermedades causadas por la contaminación.

Definicion

La contaminación ambiental puede definirse como el resultado de las acciones que la gente realiza, ya sea conscientemente o por descuido o ignorancia, que degradan o contaminan el medio natural. Por ejemplo, el botar en forma indiscriminada deshechos químicos puede producir una contaminación irreparable de fuentes preciosas de agua, elemento esencial para la vida humana.

Ciertos factores físicos adversos, la radiación iónica y substancias químicas tales como el cromo, asbestos y las del tabaco, están relacionadas con el cáncer con otras enfermedades fatales o que causan invalidez, incluidos defectos de nacimiento y de desarrollo en los descendientes de las personas expuestas a la contaminación. El control del riesgo de exposición a dichos factores tendría un efecto benéfico sobre la salud y sobrevivencia de la gente. Por consiguiente, se debe dar máxima prioridad a la eliminación de factores físicos adversos en el hogar, el colegio, el trabajo y en otros lugares.

Los agentes químicos y microbiológicos pueden afectar adversa e intensamente la salud de los trabajadores y del público en general. Los agentes microbiológicos pueden causar enfermedades contagiosas, como lo constatan los registros de hace décadas. Las materias químicas pueden causar dolencias no contagiosas. Las personas que trabajan en la producción y distribución de alimentos tienen la responsabilidad de minimizar el contacto de los consumidores, no sólo con los agentes microbiológicos, sino también con los productos químicos agrícolas que se utilizan para aumentar la cosecha y los aditivos inseguros que pueden usarse para preservar los alimentos.

Componentes del problema

Entre los elementos que contribuyen al problema de la contaminación se pueden mencionar:

  • Contaminación del aire a causa de óxidos de nitrógeno, oxidantes fotoquímicos, hidrocarburos, dióxido sulfuroso, plomo y ciertas partículas en el aire ambiental. Tales substancias pueden causar efectos patofisiológicos adversos en los niños y adultos, y pueden dañar las plantas y la propiedad.
  • Contaminación del agua, debida a descarga de deshechos humanos tratados indebidamente y deshechos industriales y agrícolas en las reservas de agua. Estas descargas contaminan el agua potable con virus, bacterias y otros microorganismos infecciosos, substancias químicas orgánicas e inorgánicas y substancias radioactivas. La contaminación del agua provoca también la disminución de oportunidades recreacionales y de los recursos de la pesca comercial.
  • Deshechos sólidos que atraen roedores e insectos a los basurales, descomponen el aire y el agua, y pueden depositar materias tóxicas en el ambiente.
  • Niveles excesivamente altos de sonidos producidos por instalaciones industriales, sistemas de transporte, sistemas de audio y otros medios, pueden llevar a una pérdida permanente de la audición, a otros efectos patofisiológicos y a perturbaciones emocionales.

Responsabilidad de los medicos

Los médicos tienen la responsabilidad de educar al público y de estimular la creación y el mantenimiento de programas de protección ambiental para sus comunidades.

Recomendacion

Los médicos como individuos y las asociaciones médicas nacionales deben tomar las medidas necesarias para que se cumpla con las responsabilidades antes mencionadas.

Adoptada por la 44ª Asamblea Médica Mundial Marbella, España, Septiembre de 1992
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

En algunos países, existe un aumento de las demandas por negligencia médica y las asociaciones médicas nacionales buscan los medios para hacer frente a este problema. En otros países, las demandas por negligencia médica son raras, pero las asociaciones médicas nacionales de dichos países deben estar alertas frente a los problemas y consecuencias que puede producir un aumento de las demandas contra médicos.

En esta declaración, la Asociación Médica Mundial desea informar a las asociaciones médicas nacionales sobre algunos de los hechos y problemas relacionados con las demandas por negligencia médica. Las leyes y los sistemas jurídicos en cada país, como las tradiciones sociales y condiciones económicas, influirán en la aplicación de ciertos elementos de esta declaración para cada asociación médica nacional. Sin embargo, la Asociación Médica Mundial estima que esta declaración debe ser de interés para todas las asociaciones médicas nacionales.

  1. El aumento de demandas por negligencia médica puede ser el resultado, en parte, de una o más de las siguientes circunstancias:
    1. El progreso en los conocimientos médicos y de la tecnología médica permite que los médicos logren proezas que eran imposibles en el pasado, pero estos logros implican nuevos riesgos que pueden ser graves en varios casos.
    2. La obligación impuesta a los médicos de limitar los costos de la atención médica.
    3. La confusión entre el derecho a la atención, que es accesible, y el derecho a lograr y mantener la salud, que no se puede garantizar.
    4. El papel perjudicial que a menudo representa la prensa, al incitar la desconfianza en los médicos y cuestionar su capacidad, conocimientos, conducta y control del paciente y al sugerir a éstos que presenten reclamos contra los médicos.
    5. Las consecuencias indirectas del desarrollo de una medicina defensiva, producidas por el aumento del número de demandas.
  2. Se debe hacer una distinción entre la negligencia médica y el accidente durante la atención médica y el tratamiento, sin que haya responsabilidad del médico.
    1. La negligencia médica comprende la falla del médico a la conformidad de las normas de la atención para el tratamiento de la condición del paciente, o falta de conocimiento, o negligencia al proporcionar la atención del paciente, que es la causa directa de un accidente al paciente.
    2. Un accidente producido durante un tratamiento médico, que no se pudo prever y que no fue el resultado de falta de conocimiento por parte del médico tratante, es un accidente desafortunado del cual el médico no es responsable.
  3. La indemnización de los pacientes víctimas de accidente médico puede ser determinada hasta el punto que no existan leyes nacionales que prohiban esto, por sistemas diferentes si se trata de una negligencia médica o de un accidente desafortunado que ocurre durante la atención médica y el tratamiento.
    1. En el caso de un accidente desafortunado sin responsabilidad del médico,la sociedad debe determinar si se debe indemnizar al paciente por el accidente y si es así, el origen de los fondos para cancelar dicha indemnización. Las condiciones económicas del país determinarán si existen dichos fondos de solidaridad para indemnizar al paciente, sin estar a expensas del médico.
    2. Las leyes de cada nación deben prever los procedimientos necesarios a fin de establecer la responsabilidad de las demandas por negligencia médica y determinar la cantidad de la indemnización del paciente, en los casos en que se compruebe la negligencia.
  4. Las asociaciones médicas nacionales deben considerar algunas o todas de las siguientes actividades, a fin de proporcionar un tratamiento equitativo y justo a pacientes y médicos:
    1. Para el público, campañas de información sobre los riesgos inherentes a ciertos tratamientos médicos y cirugía avanzados; para los profesionales, programas de formación sobre la necesidad de obtener un consentimiento informado de los pacientes sobre dichos tratamientos y cirugía.
    2. Campañas de sensibilidad pública para mostrar los problemas en medicina y la prestación de atención médica, según la estricta necesidad del control de los costos.
    3. Campañas generales de educación de la salud en el colegio y los lugares de reunión social.
    4. Elevación del nivel y de la calidad de educación médica para todos los médicos, incluyendo el mejoramiento de la formación clínica.
    5. Crear y participar en programas destinados a los médicos encargados de mejorar la calidad de la atención médica y de los tratamientos.
    6. Implementar una política apropiada de formación para médicos que tienen conocimientos insuficientes, incluyendo una política de limitación del ejercicio profesional hasta que dichas insuficiencias sean corregidas.
      Informar al público y al gobierno sobre el peligro del desarrollo de diferentes formas de medicina defensiva (aumento de atención o al contrario, abstención de médicos o incluso desinterés de parte de médicos jóvenes por ciertas especialidades a alto riesgo).
    7. Informar al público sobre la posibilidad de accidentes durante un tratamiento médico, que son imprevisibles y no son responsabilidad del médico.
    8. Solicitar protección legal para los médicos cuando los pacientes sufren accidentes que no son resultado de negligencia médica.
    9. Participar en la creación de leyes y procedimientos aplicables a las demandas por negligencia médica.
    10. Oponerse firmemente a demandas poco serias y a cobros por contingencia de parte de los abogados.
    11. Explorar procedimientos innovativos para tratar las demandas por negligencia médica, como acuerdos entre las partes, en lugar de un proceso judicial.
    12. Promover la idea de que los médicos se aseguren contra demandas por negligencia médica, cancelando el seguro el mismo médico o el empleador si el médico está empleado.
    13. Participar en las decisiones relacionadas a la posibilidad de otorgar la indemnización de pacientes víctimas de accidentes sin negligencia médica durante el tratamiento.

Adoptada por la 41a Asamblea Médica Mundial Hong Kong, septiembre 1989
y eliminadas en la Asamblea General de la AMM, Santiago 2005

Definición

La sustitución de drogas genéricas se define aquí como la distribución de un producto farmacéutico de distinto nombre o sin marca, por el producto farmacéutico recetado, es decir, exactamente la misma esencia química, en la misma dosis, pero distribuido por una compañía distinta.

Introducción

Si dichos productos farmacéuticos no son bioequivalentes debido a un proceso de fabricación diferente y/o la presencia de excipientes inactivos biológicamente distintos, la equivalencia terapéutica anticipada entre esos productos farmacéuticos también puede variar. Por lo tanto, cuando se produce la sustitución entre productos farmacéuticos que no son bioequivalentes, ni equivalentes química ni terapéuticamente, el paciente puede tener resultados peligrosos, es decir, sufrir une reacción adversa a la droga o no tener un efecto terapéutico. Por estas razones, las autoridades reguladoras nacionales deben asegurar al médico la bioequivalencia y la equivalencia química y terapéutica en la prescripción de productos farmacéuticos de distinto origen. Este principio también se recomienda en el caso de productos farmacéuticos que tengan una sola procedencia. Se debe contar con procedimientos que garanticen la calidad a fin de asegurar la bioequivalencia y la equivalencia química y terapéutica de cada partida de medicamentos.

En el proceso de selección de drogas, se deben tomar en cuenta varias consideraciones médicas, antes de recetar el medicamento elegido para una afección particular en cualquier paciente. Una vez que se hayan considerado estos aspectos, el médico debe pensar en los costos comparativos de productos farmacéuticos similares disponibles en el mercado, para responder a todas las necesidades de los pacientes. El médico tiene el derecho y la obligación de expresar su opinión en bien del paciente; por lo tanto, el médico debe seleccionar el tipo y la cantidad del producto farmacéutico que considere que es el mejor para el paciente desde el punto de vista médico y económico. Después que el paciente da su consentimiento sobre la droga seleccionada, dicha droga no se debe cambiar sin el consentimiento del paciente ni de su médico. Incluso cuando terceras personas ordenan la sustitución de drogas genéricas, se debe hacer todo lo posible para preservar la autoridad del médico sobre lo recetado. Si no se respetan estos principios, el paciente puede verse en peligro y el médico puede ser responsabilizado por dichas consecuencias peligrosas. En bien de los pacientes y médicos por igual, las asociaciones médicas nacionales deben hacer todo lo posible por mantener estos preceptos.

Recomendaciones

  1. Los médicos se deben familiarizar con las leyes y ordenanzas específicas que regulan la sustitución de drogas genéricas en los lugares donde ejercen su profesión.
  2. Al comenzar un tratamiento, los médicos deben determinar cuidadosamente la dosis de cualquier medicamento para comprobar su óptima eficacia y seguridad, en especial en los pacientes con trastornos crónicos que necesitan una terapia prolongada o en pacientes de grupos de población especiales, que no se espera que reaccionen a la droga en forma normal.
  3. Una vez que los medicamentos para las enfermedades crónicas han sido recetados y se ha comezado su administración, no se debe hacer ninguna sustitución de productos farmacéuticos o con marca registrada, sin la autorización del médico tratante. Si un producto farmacéutico es sustituido por uno genérico o de marca registrada, el médico debe controlar y ajustar cuidadosamente la dosis, para asegurarse de que exista una equivalencia terapéutica de los productos farmacéuticos.
  4. El médico tiene el deber de informar sobre las reacciones adversas a la droga que sean graves o la falta de efecto terapéutico que pueden estar relacionados con la sustitución de drogas. La investigación debe estar documentada y se debe informar de ella a las autoridades reguladoras de drogas que corresponda, incluyendo la asociación médica nacional del caso.
  5. Las asociaciones médicas nacionales deben vigilar regularmente todo lo que tenga relación con la sustitución de drogas genéricas y deben mantener a sus miembros informados sobre los avances que sean de especial interés para el cuidado de los pacientes. Cuando corresponda, se deben preparar informes a los médicos sobre los progresos importantes.
  6. Las asociaciones médicas nacionales, en colaboración con otros organismos correspondientes reguladores de drogas, deben evaluar y asegurar la bioequivalencia y la equivalencia química y terapéutica de todos los productos farmacéuticos similares, fabricados con nombres genéricos o marcas registradas, a fin de asegurar un tratamiento seguro y eficaz.
  7. Las asociaciones médicas nacionales se deben oponer a cualquiera acción que restrinja la libertad y responsabilidad del médico para recetar lo mejor para el paciente, desde el punto de vista médico y económico.