Declaración de la AMM sobre la Salud humana como enfoque primario de política para los gobiernos en el mundo


Adoptada por la 74ª Asamblea General de la AMM, Kigali, Ruanda, octubre 2023

 

INTRODUCCION

Comprender que las experiencias tempranas de la vida pueden afectar la salud en la vejez y que los principales impulsores de la salud se encuentran fuera de la atención médica es esencial para dirigir la acción para mejorar la salud donde más se necesita. Esto se ve respaldado por el párrafo 11 de la Observación General nº 14 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y por el artículo 24 de la Convención sobre los Derechos del Niño, que reconocen la importancia del papel del Estado a la hora de proporcionar un buen nivel de vida y un entorno saludable a sus ciudadanos. La Declaración de Oslo de la AMM sobre Determinantes Sociales de la Salud y la Declaración de la AMM sobre Desarrollo Sostenible reconocen que las condiciones, incluidas las ambientales, en las que las personas nacen, crecen, se educan, viven, trabajan y envejecen (a veces denominadas “sociales” o determinantes “más amplios”) influyen de manera importante en la esperanza de vida saludable, la calidad de vida[i] y la magnitud de las desigualdades en salud.

La salud humana es también un componente cardinal de la capacidad de una sociedad para prosperar; el deterioro de la salud humana afecta negativamente la productividad de una nación y, por lo tanto, la economía de una nación, lo que a su vez limita muchas acciones para prevenir la mala salud y prestar atención médica para tratar enfermedades.

Por lo tanto, además de los profesionales de la salud, muchos actores comparten la responsabilidad de preservar y mejorar la salud humana. Por ejemplo, la capacidad de influir en estos determinantes más amplios de la salud se distribuye entre múltiples departamentos gubernamentales.

Un desafío cardinal en la lucha para mejorar la salud de la población es el enfoque en el crecimiento económico a corto plazo, medido por el producto interno bruto (PIB)/ingreso nacional bruto (INB), como el principal impulsor de la política gubernamental.

La inversión en la salud de la población tiene un impacto económico positivo a largo plazo, pero el enfoque en el PIB/INB a menudo actúa en detrimento de la salud. Esto se debe a que muchas actividades aumentan el PIB/INB. como fumar daña la salud. Por el contrario, actividades como la lactancia materna y la crianza de los hijos que mejoran la salud no se miden en el PIB.

 

RECOMENDACIONES

Reconociendo esto, la Asociación Médica Mundial y sus miembros constituyentes en representación de sus miembros médicos llaman a los gobiernos a:

  1. Reconocer que los sistemas de salud que funcionan bien y accesibles para todos son importantes, pero los principales determinantes de la salud y el bienestar se encuentran fuera de la atención médica;
  2. Dar prioridad a la salud y el bienestar de la población a lo largo del curso de la vida en las decisiones de políticas gubernamentales, y incorporar parámetros de salud y bienestar de la población en las medidas de progreso y desempeño nacional;
  3. Reconocer que asegurar y salvaguardar la salud y el bienestar de la población son cruciales para un futuro sostenible;
  4. Promover la equidad en salud y abordar las desigualdades en cualquier esfera que existan, al apoyar las medidas que aborden los determinantes de la salud más amplios.

[i] Declaración de Oslo de la AMM sobre los Determinantes Sociales de la Salud – WMA – The World Medical Association

Declaración, Statement
bienestar, Climate Change, desarrollo sustentable, Determinantes sociales de la salud, equidad, Salud humana, SDH

Declaración de Oslo de la AMM sobre los Determinantes Sociales de la Salud

Adoptada por la 62ª Asamblea General de la AMM, Montevideo, Urug...

Declaración sobre el Desarrollo Sostenible

Adoptada en la 69ª Asamblea General de la AMM, Reikiavik, Island...

Declaración de la AMM sobre el Acceso a la Atención Médica

Adoptada por la 40a Asamblea Médica Mundial Viena, Austria, sept...