Nuevas normas para ayudar a la gente a controlar la utilización de su información personal de salud


La Asociación Médica Mundial ha aprobado nuevas normas éticas para los médicos que participan en la recopilación y utilización de información de salud y material biológico identificables en las bases de datos de salud y los biobancos.

Las normas establecen los derechos a la autonomía, privacidad y confidencialidad que la AMM considera que las personas deben tener a fin de controlar el uso secundario de su información personal y material biológico, también más allá del uso específico  en investigación.

Los delegados de la Asamblea anual de la AMM, realizada en Taipei, aprobaron las normas que se llamarán Declaración de Taipei, que establecen que la investigación representa un bien común que es de interés para los pacientes y también para la sociedad. La investigación que utiliza las bases de datos de salud y los biobancos puede acelerar mucho la comprensión de las enfermedades y la eficacia, seguridad y calidad de las intervenciones preventivas, diagnósticas y terapéuticas.

El Dr. Jon Snaedal, presidente del grupo de trabajo de la AMM que elaboró las normas, expresó: “Durante el proceso de revisión recibimos  comentarios de varias organizaciones de expertos externas en dos rondas de consultas. Hemos tratado de lograr un equilibrio entre los derechos de las personas que entregan sus tejidos o información para investigación y otros objetivos basados en reglas de confidencialidad y privacidad, y al mismo tiempo reconocen que la información de salud se ha convertido en una herramienta poderosa para aumentar los conocimientos”.

“Estas normas están basadas en la perspectiva de las personas y la necesidad de aumentar la transparencia. La gente quiere saber qué pasa con su información. Creemos que el consentimiento informado, aunque no es perfecto, es el instrumento más importante para proteger la autonomía personal y también la autodeterminación y la dignidad. Sin embargo, reconocemos que cuando la utilización de la información es autorizada por la legislación nacional adoptada en un proceso democrático que respeta los derechos humanos, otros procedimientos podrían adoptarse cuando se implementan reglas estrictas sobre la protección de la información”.

“Aunque estas normas están dirigidas principalmente a los médicos, instamos a otras personas que utilizan información o material biológico en las bases de datos y biobancos a adoptar estos principios”.

Las normas establecen que la recopilación, almacenamiento y uso de información y material biológico  de personas que pueden dar su consentimiento debe ser voluntario. Las personas deben tener derecho a pedir y obtener información sobre su información y su uso, también pedir que se corrijan los errores y omisiones. Las personas también deben tener derecho a cambiar su consentimiento o pedir que su información identificable o material sea retirado de las bases de datos y biobancos que evitaría el uso futuro. Cuando existe una amenaza inmediata de que la información sea mantenida anónima, los requisitos de consentimiento pueden ser eliminados para proteger la salud de la población. Un comité de ética independiente debe confirmar que cada caso excepcional se justifica.

El Dr. Ketan Desai, nuevo Presidente de la AMM, expresó que todas las asociaciones médicas nacionales deben adoptar las normas y recomendarlas a sus miembros y establecimientos.